La reordenación de los accesos de vehículos a la plaza peatonal de Ravella entra hoy en vigor. La medida pretende favorecer la movilidad e incrementar la seguridad de los peatones, y para ello se modificarán los itinerarios de entrada y salida de los garajes situados en zonas peatonales próximas al jardín de Ravella como la calle Ramón y Cajal.
Así, para realizar labores de carga y descarga y para acceder a los garajes del lateral de la plaza de Ravella donde se ubica la cafetería Maty, los vehículos deberán realizar tanto la entrada como la salida desde Juan Carlos I y por el corredor de la zona peatonal que discurre pegado al parque. El otro lado, el más próximo a los edificios, quedará bloqueado en su inicio con un banco para que solo puedan circular por este espacio los peatones.
En el caso de los garajes y carga y descarga de Ramón y Cajal, la ordenación se divide en dos zonas. Los usuarios del tramo comprendido entre la peluquería París y Rey Daviña deberán entrar y salir de sus garajes única y exclusivamente desde la calle Arapiles, según informaba ayer el Concello de Vilagarcía en un comunicado. El mismo itinerario tendrán que seguir los transportistas y vehículos de mercancías.
En lo que respecta al otro tramo de Ramón y Cajal, es decir, el comprendido entre Arapiles y la intersección con Juan Carlos I y Gumersindo Nartallo, la entrada a los subterráneos se efectuará desde Juan Carlos I, mientras que la salida será hacia Nartallo. Un elemento del mobiliario urbano impedirá el paso de vehículos hacia el acceso al parque de Ravella y Arapiles.
La Policía Local advirtió hace unos días a los conductores afectados, poniendo carteles en los portales de los garajes. A primera hora de la mañana de hoy comenzará a instalarse la señalización y a colocar los nuevos elementos del mobiliario urbano en los puntos estratégicos.
La propuesta de la Policía Local se basa en "los problemas de circulación de vehículos de reparto y de seguridad de conducción de caudales en la Praza de Ravella" a causa del toldo de la tienda de golosinas. Según consta en la documentación municipal, el toldo fue autorizado por la Xerencia, con 1,80 de altura en la parte más baja del toldo, "lo que impide el paso de los camiones blindados y algunos vehículos de reparto, obligándolos a hacer maniobras peligrosas y a adoptar otros recorridos entrando a la zona peatonal por Nartallo y Arapiles (en este momento la señalización permite entrar para carga y descarga por las dos calles), donde existen terrazas y salidas de vados", esgrime la Policía. Desde la fecha de ese informe con fecha 29 de junio de 2018, la situación es casi la misma, salvo que desapareció la terraza que impedía el paso en la esquina de Ramón y Cajal con Ravella.
