Un hombre de nacionalidad polaca y de 35 años de edad fue sorprendido ayer en una vivienda de O Terrón, en Vilanova de Arousa, cuando trataba de asaltarla, siendo retenido por los propios vecinos de la zona antes de que lo pusiesen a disposición de los agentes de la Policía Local.

Los hechos sucedieron sobre las 16.45 horas, cuando en la jefatura de la Policía Local de Vilanova se recibió una llamada en la que se alertaba de que habían sorprendido a un hombre en el interior de una casa y permanecía retenido por los vecinos.

Cuando los agentes de la Policía Local de Vilanova llegaron al lugar se encontraron con un ciudadano de nacionalidad polaca que se hallaba sentado y con heridas, producidas por cortes en las manos.

En el lugar, los agentes pudieron comprobar que el hombre había accedido al interior de la casa tras romper el cristal de la puerta con una maceta que se encontraba en las inmediaciones. Mientras trataba de acceder, se había cortado en las manos, dejando un importante rastro de sangre por diferentes estancias de la vivienda.

Fue cuando se encontraba en el interior de la vivienda cuando fue sorprendido por el propietario que, con ayuda de otras personas, consiguió retenerle mientras alertaba a la Policía local.

Mientras los agentes se encontraban en la casa recibieron una nueva llamada.

En esta ocasión se trataba de otra vecina de la zona que denunciaba que alguien había accedido al interior de su casa y, tras revolver todo, se había marchado aparentemente sin botín.

Todo apunta a que fue el mismo hombre el que entró en esa vivienda unos instantes antes de que fuese sorprendido por los vecinos.

El individuo fue puesto a disposición de la guardia Civil y trasladado al cuartel de Vilagarcía, donde pasó la noche para ser puesto a disposición judicial esta misma mañana.

Se investiga si ha podido estar detrás de otros robos registrados en la zona en las últimas semanas y que todavía se encuentran sin esclarecer.

Lo ocurrido ha causado una profunda preocupación en la zona, en la que además de esas viviendas, se ubican varios campings y establecimientos hosteleros. Todos ellos reclaman mayor presencia de patrullas de la Guardia Civil y de la Policía Local para evitar que vuelva a suceder una situación similar.