El episodio tóxico primaveral sigue su previsible avance y provoca el cierre de cuatro polígonos bateeiros más, todos ellos en la ría de Pontevedra. De este modo son ya seis de ocho los cerrados a la extracción en estas aguas, junto a tres de los cuatro polígonos de la ría de Muros-Noia. Muy pronto serán más, y no solo en éstas, sino también en las restantes rías.

Prueba de ello es que esta misma mañana el Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar) advertía al sector de que son más que probables otros cierres durante lo que resta de jornada.Posibles cierres en la ría de Vigo

En este centro ubicado en Vilaxoán (Vilagarcía), dirigido por Covadonga Salgado, argumentan que debido al indudable incremento de biotoxinas lipofílicas, y ante el mal estado en el que se encuentra el mar, lo cual dificulta la realización de muestreos, "no es descartable la realización de cierres cautelares a lo largo del día, especialmente en los polígonos Muros C, Cangas F, Cangas G, Cangas H y Baiona A, sin descartar otras zonas en virtud de los resultados que se obtengan".

A la espera de esos resulados actualmente se prohíbe la extracción y venta de mejillón en los polígonos Muros B, Muros A, Noia A, los tres de Bueu y los tres de Portonovo.

Se trata, como explicaba FARO DE VIGO el domingo, del esperado episodio tóxico provocado por el afloramiento primaveral, que con el temporal y los vientos de componente sur no puede hacer otra cosa que seguir avanzando, ya que las corrientes introducen en las rías el fitoplancton portador de biotoxinas que estaba acumulado en la plataforma continental.Sin problemas

Esta "marea roja", hay que insistir, no causa perjuicios serios al sector, ya que en esta época del año la actividad extractiva es mínima. Muy por el contrario puede considerarse incluso una buena noticia, ya que significa que entran en las rías nutrientes en abundancia, necesarios para el desarrollo tanto del "oro negro" de batea como del conjunto de bivalvos producidos en Galicia.

El incremento de las células tóxicas tampoco constituye riesgo alguno para la salud pública si se respectan las normas de extracción y comercialización, ya que el Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar) se encarga de analizar las aguas y la producción, decretando así las aperturas y cierres de bateas correspondientes, dependiendo del nivel de toxicidad.

Esto implica que de los polígonos que siguen abiertos, y en la actualidad son 42, puede sacarse molusco apto para el consumo.

Cuando FARO DE VIGO avanzaba el domingo la llegada de este esperado episodio tóxico los mejilloneros ya indicaban que "lo más previsible ahora mismo es que las biotoxinas sigan en aumento" y generen nuevos cierres de bateas, "sobre todo si se registran vientos del sur, pero ya estamos acostumbrados a convivir con ellas".

Incluso se apuntaba que a la mayoría le da igual este episodio porque ya no tienen producto comercial que vender en estos momentos del año, y de este modo el pequeño seguirá creciendo hasta sacudirse las biotoxinas y salir al mercado.

Además, este parón, si el temporal lo permite, puede ser aprovechado para afrontar la recta final de la campaña de recolección de la mejilla, iniciada el pasado 1 de diciembre.