- La suya es una voz autorizada para valorar el estado de la investigación en España. Su caso es uno más de fuga de talentos.

-No me considero un talento, hago un trabajo que me gusta, que me divierte y por ello me considero bastante afortunada. Los talentos existen en todos los trabajos y hacen que funcionemos como sociedad.

Como he comentado antes, en España tenemos centros de referencia a nivel mundial. La ciencia es de vanguardia y tenemos un sistema de salud top que apenas valoramos, hasta que salimos. El problema es la inestabilidad y los recortes. Hace falta una apuesta económica más de futuro y un plan de financiación y mantenimiento de investigación y desarrollo que vaya mas allá de las siglas de los partidos políticos.

- ¿Qué cosas de España le harían falta a la sociedad americana y viceversa?

-De España a Estados Unidos, sin dudarlo, el sistema sanitario y el acceso a la vida universitaria sin necesidad de hipotecarse de por vida. En cuanto de Estados Unidos a España, me traería la manera con la que mediante la educación en los colegios fortalecen la autoconfianza de los niños. Crecer sin miedos y sin castigos hace que no se planteen límites de a dónde pueden llegar.