El Pazo do Monte es una de las propiedades con el pasado más enigmático de la comarca. Por Ribadumia circula la historia del asesinato a finales del siglo XIX de uno de sus dueños, a la sazón alcalde, a manos de uno de uno de sus criados, y poco más. Pero una investigación histórica impulsada por la bodega Mar de Frades servirá para poner fin a ese desconocimiento.
Mar de Frades es una bodega ubicada en Meis y que pertenece a Zamora Company, un gigante de la alimentación que también tiene en cartera marcas como Licor 43 y Ramón Bilbao, una de las firmas icónicas de la denominación de origen Rioja. El grupo compró el Pazo do Monte a finales de 2017, con la intención de crear en esta finca de Ribadumia uno de los mayores viñedos de toda la comarca.
Pero el proyecto va más allá de la dimensión meramente empresarial, ya que también se ha reservado una parcela de 5.000 metros cuadrados para un ensayo científico en colaboración con la Misión Biolóxica de Galicia; y se ha impulsado una profunda investigación de la historia del Pazo do Monte. La enóloga de Mar de Frades, Paula Fandiño, cuenta que los trabajos de prospección histórica acaban de empezar, pero que ya se conocen los primeros datos.
Por ejemplo, se puede datar la fundación de la casa a mediados del siglo XVII. "El fundador del pazo fue Alonso Troncoso de Sotomayor y Gondar, un canónigo de la catedral de la Santiago". Fallecido el 3 de junio de 1689, está precisamente enterrado en la basílica compostelana. "El Pazo do Monte nunca fue su residencia principal, sino más bien una casa de recreo".
El Pazo do Monte se encuentra en la parroquia de Lois (municipio de Ribadumia), a orillas del río Umia, y la finca original constaba de 92 hectáreas, si bien posteriormente se partió, y el grupo empresarial al que pertenece Mar de Frades compró 25.
La plantación de albariño se inició en 2018, y la bodega incluso abrió la posibilidad al público en general de que participasen en dicho trabajo, plantando sus propias cepas. Por el momento, ya hay 23.000 plantas distribuidas por 18 hectáreas de viñedo, pero está previsto llegar a las 21 hectáreas a lo largo del año próximo.
Paula Fandiño explica además que se han reservado 5.000 metros cuadrados para una investigación conjunta con la Misión Biolóxica de Galicia, que depende del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Esta entidad cuenta con un "banco" de plantas, en el que hay varias variedades de uva recogidas en su día en Galicia pero de las que se desconoce prácticamente todo, incluso su nombre.
Lo que va a hacer la Misión Biolóxica, a las órdenes de la directora del área de Viticultura, Carmen Martínez Rodríguez, será plantar en el Pazo do Monte tres de esas variedades, para conocer su comportamiento y si podría tener o no interés comercial o científico.
Otro de los alicientes de esta propiedad es el pazo, una construcción que está protegida por Patrimonio pero que se encuentra en mal estado de conservación, pues lleva décadas deshabitada. Por el momento, no está previsto proceder a su rehabilitación, aunque en un futuro más o menos próximo podría ser un poderoso imán para los amantes del enoturismo.
