Cerca de la mitad de las interrupciones de embarazo que se practican en la provincia de Pontevedra corresponden a mujeres de edades comprendidas entre los 30 y los 39 años. Fueron, según datos de la Dirección Xeral de Saúde Pública de la Xunta de Galicia, 311 en un año, un 47 por ciento del total, 665. A esta franja de edad le sigue la de jóvenes de entre 20 y 29 años, con 240 abortos, es decir, un 36 por ciento.

Por el contrario, las mujeres que menos se sometieron a este tipo de intervenciones fueron las mayores de 39 años, con 75 (un 11 por ciento), y las menores de edad, con 38 (un 6 por ciento).

En los últimos seis años, debido a las campañas de educación sexual y prevención del embarazo no deseado, se ha producido un descenso.