Rodrigo Ramos, un joven pescador de A Illa de Arousa, capturó el viernes con sus aparejos un bogavante de 5,6 kilos de peso y aproximadamente un metro de largo.

Se trata de un ejemplar de portentosas pinzas que se integra por méritos en la lista de ejemplares de diferentes especies que han sido noticia en los últimos tiempos debido a sus inusuales proporciones.

Los pulpos de 5 y 7 kilos de peso localizados el mes pasado en la ría de Vigo, la raya de 29 kilos capturada en San Adrián de Cobres (Vilaboa), también a principios de año, o los congrios -especie que suele compartir cueva con el bogavante- de 31 y 22 kilos pescados en Cabo Silleiro (abril de 2017) y Panxón (junio de 2018) son solo algunos ejemplos.

Son casos extraños a los que ahora, como queda dicho, se suma este espectacular bogavante; miembro de una especie que puede llegar a vivir hasta medio siglo.

Quienes tuvieron la oportunidad de verlo en directo, y aún con el crustáceo vivo, no daban crédito. Y desde luego los que lo observan en la foto, puede que tampoco.

El crustáceo más grande

Ya se sabía que el bogavante, lubrigante, bugre, abacanto o como quiera llamársele pasa por ser el crustáceo más grande. Pero una cosa es eso, y otra muy distinta que alcance unas dimensiones tan descomunales.

Dicen los expertos que el bogavante puede pesar entre 300 gramos y cinco kilos, mientras que sus dimensiones van desde los 30 a los 75 centímetros. De ahí que sea tan especial ese ejemplar de aproximadamente seis kilos y un metro de largo capturado por Rodrigo Ramos en una zona rocosa -esta especie habita fondos rocosos entre los 2 y los 50 metros de profundidad- situada en algún punto entre A Illa de Arousa y Vilanova.

A sus 23 años ya había pescado algún ejemplar "potente", de hasta cuatro kilos, pero lo de esta vez resulta sorprendente.

Como sorprende también el perfecto estado en que fue capturado este sabroso manjar de la ría de Arousa, a pesar de sus fuertes embestidas en los aparejos.

Lo cierto es que conservaba intactos sus cinco pares de patas, cuatro de ellos en el tórax y el quinto caracterizado por las grandes pinzas de su extremo, en el caso de este bogavante pescado en A Illa verdaderamente amenazantes.

La más gruesa, que suele ser la izquierda, es la que utilizada este crustáceo para triturar a sus presas -sepias, pulpos, calamares, pequeños peces y moluscos-, mientras que utiliza la derecha, más fina, como herramienta de corte.

De diestro a zurdo

Los entendidos en la materia detallan que si pierde la primera en la siguiente muda la pinza de corte se transforma en una gruesa, y con las mudas sucesivas regenerará la fina, de ahí que el bogavante pueda pasar de ser "diestro" a "zurdo".

En el momento de su venta también eran fácilmente apreciables sus antenas, dos de ellas de considerable tamaño y las otras cuatro, mucho más cortas.

Para los menos entendidos en la materia o aquellos que nunca antes vieran un bogavante, "pariente" de la langosta, puede decirse que tiene un cuerpo robusto y alargado, con un tronco liso, abdomen de siete anillos y una cola similar a un abanico.