La "narcoabogada" Tania Varela será juzgada el día 26 de febrero por presunto blanqueo de dinero procedente del narcotráfico. La cambadesa cumple actualmente pena de prisión por narcotráfico, y ahora se enfrenta a otros tres años y medio de cárcel y a una multa de 220.000 euros, porque supuestamente utilizó una empresa fantasma para comprar con dinero del tráfico de drogas un coche de gama media-alta y unos terrenos en O Grove.
Según el escrito de acusación, Tania Varela ya se dedicaba al narcotráfico en 2005, cuando hasta ahora siempre se creyó que no se había sumergido en ese mundo hasta 2006, cuando conoció a David Pérez Lago, hijastro de Laureano Oubiña.
El fiscal delegado antidroga añade que el 16 de mayo de 2005, Varela creó una sociedad, Promociones Rialto 72-74, con un capital social de 3.100 euros. Poco después, en agosto, la "narcoabogada" habría comprado por algo menos de 30.000 euros un Audi A3, aunque aparece como titular de dicho vehículo Promociones Rialto.
Posteriormente, prosigue el escrito de acusación, en abril de 2006, "la imputada aportó 45.000 euros que procedían de su actividad de narcotráfico, a la mercantil Promociones Rialto 72-74, con la finalidad de que ésta última adquiriera unos terrenos en Porto Meloxo (O Grove)". El fiscal del caso, Pablo Varela, considera que ambas adquisiciones se hicieron con la finalidad de "lavar" dinero del narcotráfico e introducirlo en los circuitos legales.
El juicio generará una gran expectación, puesto que será la primera vez que Tania Varela se deje ver públicamente en Galicia desde 2013. Entonces, huyó de la justicia para no tener que entrar en la cárcel, y pasó media década en paradero desconocido.
Tras ser detenida, la Audiencia Nacional ya ordenó su ingreso automático en prisión, por lo que ya no pasó por ningún juzgado gallego. Tania Varela está cumpliendo una condena de siete años por tráfico de drogas, y ahora se enfrenta a otra de tres años y medio.
La droga de Corme
La presente causa por blanqueo de dinero es una pieza separada de la de narcotráfico. Una organización gallega, de la que formaban parte Tania Varela y David Pérez Lago intentó meter en Galicia cuatro toneladas de cocaína en abril de 2006. A raíz de ese operativo, que permitió la intervención de parte de la droga en Corme, ambos cayeron en las redes de la policía.
Con el tiempo, Pérez Lago no quiso jugársela a los dados en un juicio, e hizo un trato con el fiscal, gracias al cual éste rebajó los 20 años de cárcel que pedía para él a solo nueve. Pero Tania Varela se negó a llegar a ningún acuerdo, y pleiteó hasta el último minuto.
En 2013, el Tribunal Supremo le cerró la última puerta, y confirmó su condena a siete años de cárcel. Sin pacto, no había posibilidad de recortar esa cifra, y Varela decidió desaparecer. Lo consiguió durante un tiempo. Pero no el suficiente para que los delitos prescribiesen.
