José Cacabelos y Carmela Silva, él, alcalde de O Grove, ella, presidenta de la Diputación, dieron muestras esta mañana de su “buen rollo”. Militan en el mismo partido, el socialista; se llevan bien, tanto en lo personal como institucionalmente; y están dispuestos a hacer carrera política juntos, al menos cuatro años más.
De hecho esta mañana además de fundirse en un abrazo se conjuraban para ganar las elecciones y, en cierto modo, daban el pistoletazo de salida a la campaña, primero anunciando un convenio que permitirá construir un local social para personas mayores, y después dejando claro que Monte da Vila tendrá Auditorio, “sí o sí, pese a quién pese”.Confían en sus posibilidades
Los dos se felicitaron mutuamente por el trabajo realizado y la titular del ente provincial incluso pronosticó que seguirá ocupando el cargo que ostenta cuando toque inaugurar el citado Auditorio, cuyo proceso de licitación arranca el lunes. Y eso, teniendo en cuenta que el proceso aún será largo, es tanto como decir que los socialistas van a ganar la próxima cita electoral.
Cacabelos no escatimó elogios hacia Carmela Silva diciendo de ella que trabaja “hombro con hombro, mano a mano, con los Concellos”, e insistió en que “a pesar de todas las piedras en el camino el Auditorio va a ser una realidad”, achacando el mérito, precisamente, a la presidenta provincial.
Y ella respondió del mismo modo, con abalanzas al regidor meco y mostrándose “encantada” con esto del Auditorio y otros proyectos encauzados juntos, antes de espetar que “se nota mucho cuando hay políticas y compromisos en los Concellos que piensan en las personas, y desde luego el Concello de O Grove es una Administración que ha demostrado ese compromiso”.
