El Instituto Galego de Formación en Acuicultura (Igafa), con sede en A Illa, vuelve a ejercer de hospital para mamíferos marinos. En sus instalaciones se encuentra ya el lobo marino “Barizo”, que como tantos otros que lo hicieron con anterioridad afronta aquí su última fase de recuperación antes de recobrar la libertad.

De 110 centímetros de longitud y de 23 kilos de peso, el animal apareció varado en las costas de Malpica el pasado 6 de enero y fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos de lobos marinos del establecimiento veterinario de la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos (Cemma), en Nigrán, “tras comprobar que presentaba síntomas de desnutrición y afección respiratoria”.

Así lo indican en la Consellería do Mar, de la que depende del Igafa, antes de precisar que “tras una evolución favorable, mejorar su estado y comenzar a alimentarse por sí mismo, el lobo marino fue trasladado “para continuar su recuperación” en A Illa, donde también se han recuperado tortugas.

Ocupará una de sus piscinas durante tres o cuatro semanas antes de ser embarcado para ser liberado en aguas del Gran Sol.

Como es habitual, “el mantenimiento y la atención sanitaria del mamífero le corresponderá al Cemma, contando con la participación voluntaria del alumnado y demás personal del Igafa, que aprovechará la estancia de esta cría de foca para formar a los estudiantes en aspectos relacionados con el cuidado de los mamíferos marinos”.Una exposición

También se aprovechará la estancia de “Barizo” en el centro para organizar una exposición sobre los mamíferos marinos en Galicia.

Resaltan en la Xunta que esta acción forma parte de la colaboración que viene manteniendo con Cemma desde el año 2003, a través de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, propiciando así la recuperación de los mamíferos marinos que llegan a la costa gallega en mal estado o heridos.

De ahí que el Igafa ya participara en la recuperación de ocho ejemplares de crías de lobos marinos en los años 2013, 2014, 2016, 2017 y 2018.