La peatonalización de la céntrica calle Castelao de O Grove estaba terminada hace mucho tiempo. Pero no estaba completa del todo hasta ayer, cuando por fin se pusieron en funcionamiento los pivotes que van a limitar el paso de vehículos por este concurrido vial.

Es una forma de garantizar que se cumplen los horarios de carga y descarga, y también el modo de que los turismos, furgonetas y camiones solo transiten por la popularmente conocida como calle "Catorse" si están autorizados para ello, es decir, si son de residentes en uso de sus garajes o si prestan servicios de carga y descarga o de emergencias.

El alcalde, José Cacabelos, se hizo acompañar de diferentes miembros de su gobierno para poner en marcha estos pivotes -que por la tarde sufrieron algunos fallos técnicos, según los usuarios- y aprovechó para anunciar que el plan de humanización desplegado en el centro de la villa se extenderá ahora a la calle Luis Seoane, que se sitúa paralela a la Castelao y entre ésta y la avenida de Beiramar.

Precisamente en Beiramar, entre la cofradía de pescadores y la rotonda de las garzas, se desarrollan trabajos de mejora que, además de dotar a la zona de aceras más anchas y cómodas, propician el desdoblamiento de la calzada para facilitar el doble sentido de circulación.

De este modo, en cuanto esa obra esté terminada -el alcalde pronostica que será este mismo mes-, "podremos empezar la peatonalización de Luis Seoane, donde posiblemente, si tenemos presupuesto suficiente, instalaremos también pivotes con los que se va a reducir el paso de vehículos, limitándolo a los usuarios y obligando a los de carga y descarga a cumplir los horarios establecidos, como en la Castelao".

De O Corgo a Monte da Vila

Una vez peatonalizada Luis Seoane ya no se podrá avanzar por ella desde Rúa da Praza para llegar a Luis Casais y girar a la derecha hacia la Castelao y Monte da Vila. Ese movimiento tendrá que hacerse por O Corgo, y de hecho podrá realizarse en esa zona utilizando el tramo de la avenida de Beiramar situado entre el edificio de la cofradía y la rotonda de las garzas, de ahí que se esté desdoblando en la actualidad.

De este modo tanto Luis Seoane como Pratería y las demás calles que quedan situadas entre la Castelao y Beiramar "irán ganando protagonismo a nivel peatonal", garantiza el primer edil.

Incide así en su vieja idea de "humanizar nuestra villa, pensando en lograr un pueblo ideal para los peatones y los paseos en bici que garantice la accesibilidad y agrade tanto a nuestros vecinos como a los turistas que nos visitan".

Será un centro urbano, insiste Cacabelos, en el que "gracias a las peatonalizaciones será posible potenciar tanto el comercio local como nuestra hostelería".

Cita para ello, como ejemplos, las calles antes aludidas. Pero también alguna más, entre ellas la también reformada avenida de Alexandre Bóveda y el tramo de Beiramar sobre el que ya se actuó hace meses.

"Con estos y otros proyectos de peatonalización, humanización y embellecimiento que tenemos proyectados estamos trabajando para lograr un pueblo del que todos los grovenses nos sintamos aún más orgullosos", sentencia José Cacabelos Rico.