Los escasos avances que se están registrando en el conflicto de la Residencia Valle-Inclán han provocado que el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, reciba carbón como regalo de los Reyes Magos. Representantes de Gañemos Vilanova y de los trabajadores de la residencia entregaron hoy en el registro municipal un cofre llenó de carbón, comestible eso sí, para el alcalde. Todos ellos participaron unos minutos antes en una rueda de prensa en la que mostraron su malestar con la Consellería de Política Social. La acusan de querer cerrar a toda costa la residencia, mientras al regidor le culpan de no haber hecho lo posible para tratar de evitar esta situación y mantener los 50 puestos de trabajo y a los más de un centenar de residentes.