El parque acuático de Meis permitirá la creación de unos 80 puestos de trabajo, según datos facilitados por el alcalde, José Luis Pérez. Para cubrir estos empleos, tendrán preferencia los vecinos del término municipal de Meis, y dentro de estos, los miembros de la comunidad de montes de San Vicente de Nogueira, en cuyos terrenos se ubicará la instalación de ocio.
Será a mediados del próximo mes de enero cuando el Ayuntamiento abra un plazo para que todos los interesados en trabajar en el "acuapark" meisino dejen su currículo en el Ayuntamiento.
En la administración municipal se recogerán, pero José Luis Pérez advierte de que la última palabra la tendrá la empresa promotora del centro de ocio. "Será la empresa la que haga las entrevistas y explique a los candidatos los siguientes pasos a dar".
Asimismo, la administración municipal ha enviado a un pequeño grupo de desempleados a realizar un curso de socorrismo en la Cruz Roja de Pontevedra, dado que en este tipo de centros es necesario contar con personal diestro en primeros auxilios.
El perfil de los trabajadores del que se llamará Parque da Auga de Meis, y que será el mayor parque de atracciones acuático de Galicia y el Norte de Portugal es muy variado. Así, hará falta personal de restauración, puesto que habrá instalaciones de comida dentro del recinto, de socorrismo acuático, de mantenimiento, y de limpieza, por citar algunos de los oficios que van a ser requeridos por la firma.
Tramitación administrativa del mayor parque acuático de Galicia
En lo que se refiere a la tramitación administrativa del proyecto, a principios de enero termina el plazo de un mes de exposición pública del proyecto de urbanización. Por el momento no se ha presentado ninguna alegación al mismo. En cuanto al proyecto de obra y ejecución, llegará en breve al Concello, y si los servicios técnicos y jurídicos municipales lo avalan, recibirá la licencia ya sin periodo de alegaciones. Así las cosas, y con la vertiente administrativa encarrilada, lo que más preocupa a la empresa para poder abrir en el verano de 2019, como pretende, es la meteorología.
El Parque da Auga de Meis se ubicará en el lugar de Penente (parroquia de San Vicente de Nogueira), situado en las inmediaciones del enlace de Mosteiro en la Autovía do Salnés, por lo que sus comunicaciones por carretera son buenas. El proyecto contempla el uso de una parcela total de 70.000 metros cuadrados, con una quincena de toboganes, muchos de los cuales aprovecharán los desniveles naturales del terreno, que albergó en el pasado una cantera de piedra.
Su apertura está generando una enorme expectación en Galicia, puesto que hay pocos parques acuáticos en todo el Noroeste peninsular -sí abundan en el Levante- y se trata de infraestructuras turísticas que atraen un movimiento de gente muy importante. De hecho, el "acuapark" tendrá capacidad para unas 5.000 personas diarias, y sus promotores aseguran que tendrá unas instalaciones modernas y seguras. Otros de sus atractivos serán la piscina de olas -que según la empresa triplicará en superficie a la de Cerceda-, o la piscina infantil. Los juegos, por su parte, harán guiños a la arquitectura tradicional gallega.
José Luis Pérez ha dicho también a FARO que antes de la inauguración formal del Parque da Auga, "habrá una jornada para que puedan disfrutar de él los vecinos de Meis".
El mayor parque acuático de Galicia, imán de negocios
La importancia del parque acuático es que podría actuar como un imán para otras infraestructuras turísticas, y que su implantación podría beneficiar a numerosos municipios vecinos.
El alcalde de Meis afirma al respecto que el Ayuntamiento ha recibido en las últimas semanas llamadas de varios empresarios vinculados a la hostelería, preguntando por las condiciones urbanísticas del suelo y los requisitos necesarios para poner en marcha un establecimiento en las proximidades del "acuapark".
Según el alcalde, también los comuneros de San Vicente han recibido llamadas en este sentido, lo que podría redundar en mayores ingresos para los vecinos de esta parroquia en concepto de alquiler de terrenos.
Los parques acuáticos generan sobre todo necesidad de alojamientos, y un ejemplo de ello es el de Amarante, en el Norte de Portugal, cuyos usuarios llegan a pernoctar en Oporto, Guimaraes o Penafiel, ciudades todas ellas situadas a más de 20 kilómetros de distancia del parque acuático. En el pueblo de Amarante hay una importante oferta hotelera, sobre todo de pequeños negocios.
Pero José Luis Pérez señala que también han recibido llamadas de hosteleros interesados en abrir un restaurante en las proximidades del parque. A este respecto, el ejemplo más válido es el de Cerceda, en A Coruña, ya que en el exterior del recinto hay hasta tres casas de comidas.
El coste del proyecto de Meis supera los seis millones de euros, y lo construirá una empresa especializada de Valencia.
