La Fundación Biodiversidad y la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife) dan la voz de alarma ante la presencia de ingentes cantidades de residuos procedentes de la actividad humana que afectan al ecosistema natural, y especialmente al medio marino y zonas protegidas.

Esta vez ponen como ejemplo el istmo y la playa de A Lanzada, que forma parte de la Reserva Ornitológica de O Grove, gestionada por la citada organización conservacionista. Para concienciar a la población y mostrar los peligros o amenazas que se esconden en espacios como éste, sobre todo por la proliferación de microplásticos, las citadas entidades y la concejalía de Medio Ambiente grovense decidieron implicar a los alumnos del instituto Monte da Vila.

Medio centenar de jóvenes de este centro se sumaron a una jornada de limpieza en la emblemática playa de A Lanzada que les permitió retirar todo tipo de escombros y aprender sobre el terreno de qué modo afectan al medio ambiente o incluso cómo deben evitar su proliferación.

El grupo de acción de SEO/BirdLife en la provincia de Pontevedra, especialmente volcado con la actividad conservacionista en la península grovense, abanderó esta iniciativa en la que durante tres horas de trabajo y aprendizaje los alumnos mecos pudieron recoger "toda clase de basuras contaminantes, desde bastoncillos para la limpieza de oídos hasta cordeles, pasando por cuerdas, botellas, zapatos, vidrios, nasas, tapones, redes, boyas y cubos", explican los organizadores.

Como también resaltan, y esto es lo más positivo de la jornada, que con esta acción "tanto profesores como el Concello de O Grove y demás organizaciones tratamos de que los niños sean conscientes de la gran acumulación de basura en el entorno costero y su impacto negativo en la naturaleza", aclarando que la amenaza proviene "no solo de los residuos de gran tamaño, sino principalmente de los plásticos más pequeños".

Como avanzaba FARO hace unos días, este tipo de propuestas se enmarcan en el programa "Playas, voluntariado y custodia del territorio" de la Fundación Biodiversidad, creada en 1998 e integrada en el Ministerio para la Transición Ecológica.

Es un colectivo cuya misión es "proteger el patrimonio natural de España", y en colaboración con todo tipo de entidades o administraciones, como es el caso de SEO/BirdLife y el Concello de O Grove -aunque fueron más de un millar de colectivos en las dos últimas décadas-, desarrolla todo tipo de proyectos, destinando desde 1998 más de 231 millones de euros al desarrollo de 1.900 iniciativas o planes de conservación.

De este modo, con programas como el de "Playas, voluntariado y custodia del territorio", se fomenta la acción ciudadana en materia de conservación de la naturaleza y los paisajes, prestando especial atención a la preservación del dominio público marítimo terrestre, y en particular de playas como A Lanzada.

Cabe precisar que este tipo de iniciativas se desarrollan al abrigo del proyecto europeo Life Intemares, que trata de lograr "una red de espacios marinos Natura 2000 gestionada de manera eficaz e integrada, con la participación activa de los sectores implicados y la investigación como herramientas básicas para la toma de decisiones".