Los vinos elaborados con uva Albariña son claramente predominantes en Rías Baixas. Pero esto no significa que no se esté ensayando con otras variedades, también autóctonas, y amparadas por los reglamentos del Consello Regulador.

Es el caso de Adegas Galegas, que hizo pública ayer la salida de una nueva línea de vinos: "Pedro Castes Autóctonas". Se trata de unos caldos monovarietales elaborados a partir de uvas originarias de Galicia: Treixadura, Caíño blanco, Loureira y Caíño Tinto.

La bodega explica que los vinos se han elaborado en sus instalaciones de Arbo, pero con uvas procedentes de todas las subzonas de Rías Baixas, incluida la de O Salnés. "El objetivo es destacar el potencial de algunas de las variedades más representativas de la denominación", explican.

Así, son cada vez más las bodegas que sacan preparaciones especiales de tinto o blancos diferentes del albariño, aunque éste siga reinando claramente. Los espumosos son, precisamente, una de las apuestas de Rías Baixas que más ha crecido en los últimos años. Espoleados en su día por la crisis del cava catalán, se trata de vinos que han logrado una importante cuota de mercado no solo en las fiestas navideñas, sino también en la hostelería.