El Consello Regulador do Mexillón considera que hasta el año 2007 se destinaba el 60% del producto a transformación y el 40% a fresco, invirtiéndose la tendencia desde entonces hasta hacer que se genere ya el 60% de mejillón para las depuradoras y el 40% restante para industria. En gran medida porque "en 2007 se aplicó el arancel cero" para las importaciones del mejillón chileno, y esto propició que "conserveras con intereses en el extranjero redujeran su demanda de mejillón gallego en favor del foráneo" incluyendo en sus productos, a pesar de todo, el término o la leyenda "de las rías gallegas", lo cual "constituye un fraude para el consumidor y una práctica de competencia desleal", recuerda la DOP.

Esto es, precisamente, lo que rechaza Anfaco cuando insiste en que sus empresas apuestan por la materia prima gallega y pide que se respete la libertas de mercado y la defensa de la competencia. A su juicio, que los bateeiros vendan más producto a las depuradoras no quiere decir que las conserveras carezcan de interés por esta materia prima.