José Cacabelos, el alcalde grovense, confía en que se cumplan los plazos y antes del 31 de diciembre esté finalizada la transformación de la avenida de Beiramar, en el tramo comprendido entre la sede de la cofradía de pescadores y la conocida como rotonda de las garzas.

Es una actuación que, como se explicó en otras ocasiones, se considera crucial, ya que además de transformar ese espacio permitirá otras mejoras complementarias, como la peatonalización de la calle Luis Seoane.

Badenes

Resalta el primer edil que van a invertirse unos 160.000 euros en los trabajos de desdoblamiento -y mejoras complementarias- previstos en este céntrico vial, permitiendo así el doble sentido de circulación "y la adecuada humanización de la zona".

Ayer daba por iniciados estos trabajos y anunciaba que van a dotar a la carretera de tres badenes y una plataforma elevada que unirá la plaza de O Corgo con la calle Alcalde Xacobe Barral, formando así "una senda peatonal" que favorecerá la accesibilidad en el centro urbano.

Alega también José Cacabelos que "este desdoblamiento es uno de los puntos clave del buen funcionamiento en la humanización de las calles del centro, al tiempo que permite acometer mejoras de accesibilidad para que todo este espacio cumpla los requisitos adecuados, como disponer de aceras con dos metros de ancho".

Paralelamente "se cambiará el aparcamiento en batería que existe en algunos tramos por el aparcamiento en línea en su totalidad".

Como se avanzó en su momento, el proyecto contempla la colocación de un punto de carga para coches eléctricos, el cual "se situará en las proximidades de la cofradía y supone un ejemplo más de la perspectiva de este Concello, en el sentido de realizar obras atendiendo al desarrollo futuro del pueblo y no solo mejorando el aspecto externo de las calles".

Como avanzó hace semanas a los vecinos y comerciantes, en el momento de explicarles las características del proyecto, la obra provocará cortes puntuales en la circulación rodada, por lo que el alcalde apela a la colaboración y comprensión de los ciudadanos, pidiéndoles disculpas por las molestias que pueda causar "una obra tan necesaria como ésta".