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Fuentes que despiden vapor e historia

Cuntis recupera por 9 meses Lume de Deus, una de sus fuentes termales que componen auténticos tesoros que ocultan secretos históricos y antropológicos únicos en Galicia

La fuente termal Lume de Deus, en plaza Galicia. // Noé Parga

Una gota de lluvia se filtra por la tierra hasta una profundidad de tres kilómetros donde se pasará absorbiendo minerales a una temperatura de 90ºC durante ocho años antes de que salga, ya con sus propiedades mineromedicinales, por Lume de Deus. Ese es el proceso que pasa el agua termal y que convierte a Cuntis en un sitio privilegiado. En su casco urbano, en cualquier lugar donde se haga un pozo, saldrá agua caliente, lo que provoca que se tenga que traer el líquido elemento frío de otros manantiales del entorno, como por ejemplo Maráns, situado a 800 metros del centro, que surte la fuente pública situada en la plaza das Árbores.

Ya sea para calmar la sed, limpiar atuendos o incluso para curar dolencias, las fuentes son sus monumentos y símbolos. Más allá de su riqueza hidráulica, Cuntis posee una gran colección de fuentes. Algunas de ellas guardan secretos arqueológicos e históricos, que van desde la época romana hasta la actualidad, pasando por la II República. Monumentos por los que sus caños no solo sale agua, sino historia.

Única por poseer la arqueta de planta cuadrangular de época romana más antigua que se conserva prácticamente intacta en Galicia, la fuente Lume de Deus, solo rivaliza en este apartado con la del balneario romano de Lugo, de planta circular. "Hai outras cuxa planta foi modificada ou canalizada de outro modo", aclara el ingeniero en Técnica Naval por la UDC, escritor y periodista, Héitor Picallo. Tan solo aparece alterada la unión del vaso ya que en el siglo XX se sustituyó el 'opus caementicium', o cemento romano, por cemento 'portland'. "Se vas alí e te mollas as mans na agua, estaralo facendo nunha fonte onde fai 2.000 anos as metía un romano ou un calquer outro habitante da época", indica.

Se estima que su origen es, como mínimo, del siglo I. "Por xullo de 1908 fixéronse unhas obras de limpeza da arqueta onde atoparon 500 moedas romanas de distinta época, dende o século I ao IV, toda a época Baixo Imperial, pero a moeda máis antiga que alí se atopa está acuñada entre o ano 14 e 15 despois de Cristo, polo que se o contenido é de esa época, o continente debe ser do mesmo tempo", aclara Picallo.

La fuente Lume de Deus tiene una gran particularidad en cuanto a su disfrute y es que durante los meses de verano permanece cerrada a los usuarios, ya que el derecho de uso pertenece a esa época del año al balneario Termas de Cuntis. Los vecinos y visitantes solo pueden probar sus aguas entre los meses de octubre hasta junio. Precisamente el Concello espera abrir su uso hoy mismo.

"Os veciños fixeron uso da auga desta fonte de forma interrumpida e sempre houbo algún tipo de conflito en canto se tratou de vulnerar o uso público", explica Picallo. Según el escritor, los "líos" comienzan en 1865 a raíz de un expediente que se promueve por parte de la compra del hotel Da Virxe y los derechos de uso de ese agua. "Parece ser que os propietarios se estaban extralimitando nos seus dereitos" iniciando un conflicto que llega hasta nuestros días.

Picallo, miembro de la Plataforma Veciñal Na Recuperación do Patrimonio Termal que se dedica al estudio sobre las termas cuntienses lo tiene claro. "En Cuntis hai 19 burgas e tres en espazos públicos e se explotan ao día 2.500 metros cúbicos. É como unha gran piscina olímpica con auga a 60ºC.... como para decir que non hai auga para todos", indica.

La fuente despide agua a 58ºC, de PH básico no ácido, por lo que su uso es bueno para tratar males reumáticos, como la artrosis o dolores musculares; afecciones respiratorias como prevención de bronquitis, catarros, resfriados o sinusitis; o afecciones de piel como psoriasis o dermatitis.

Lavaderos termales

El remanente de las aguas de Lume de Deus se aprovecha para otro de los monumentos hídricos más emblemáticos como es el lavadero termal. El de Cuntis es único en Galicia por sus características: contiene once pilas individuales, de las cuales 5 son de este agua termal y otros 6 de agua fría.

Se conoce de la existencia de un lavadero en la zona por una publicación de 1697, pero posteriormente sufrió varias modificaciones. En la década de 1820 se construyeron cuatro pilones individuales. El actual, con agua fría y caliente, fue promovido durante la II República y finalizado en los años 50.

Burga de la calle Real

Los vecinos también tienen una fuente termal que pueden utilizar durante todos los días del año y es la que está situada en la calle Real. Su origen, de 1835, puede parecer mucho más modesto que la de Lume de Deus, pero no la historia que esconde. Y nunca mejor dicho ya que, esconde todo un baño romano de 4,5 por 4,5 metros.

"En 1831, o primer médico balneario de Galicia, Manuel Jacobo Fernández Mariño, descubreu este baño romano, realizado en argamasa, con auga quente e unha figura de bronce que presumiblemente sería unha Minerva, cunha inscripción. Como autoridade da época non só nas augas como na propia infraestrutura, mandou revestila con pedra para salvagardar este baño romano das inclemencias do tempo", relata Picallo, que cita la existencia de manuscritos del propio Fernández Mariño que se conservan en Santiago.

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