A principios de julio la directiva de la Anpa del colegio de Carril presentaba su dimisión, después de un año duro y complicado de reivindicaciones y constantes enfrentamientos con la dirección del centro y con la Consellería de Educación. El 12 de septiembre los niños volvieron a las aulas y lo hicieron sin que la Anpa estuviese en funcionamiento. Pero un grupo de madres y padres ha dado un paso al frente para tomar las riendas de la asociación y continuar luchando para que sus hijos sean educados en las mejores condiciones posibles.

El miércoles se celebró una asamblea a la que se invitó a todas las familias del centro para abordar la recuperación de la asociación y el jueves la nueva junta directiva quedó constituida con diez miembros.

En previsión de que hubiese progenitores interesados en coger el relevo, algunos componentes del anterior equipo gestionaron el Plan Madruga para que pudiese continuar en marcha este curso. Finalmente comenzó a funcionar el pasado día 17. Se trata de un servicio de conciliación familiar y laboral que atiende a los niños desde primera hora de la mañana, antes de entrar a clase.

Fuentes próximas a la nueva directiva admiten que en cuanto a las actividades extraescolares, no podrán ofertarse todas las habituales debido a la falta de tiempo. Ejemplo de ello es que no habrá natación.

La anterior Anpa del colegio Rosalía de Castro fue una de las más activas de Vilagarcía y gracias a su tesón logró importantes mejoras para los alumnos, como una ampliación del comedor o la sustitución de la viejas tuberías, que aportaban un elevado nivel de hierro al agua.