La Festa do Marisco de O Grove del 4 al 14 de octubre, está totalmente encauzada. Y eso se nota en la celebración de diferentes actividades lúdicas y promocionales desarrolladas en las últimas semanas a modo de aperitivo, pero también en la instalación de las carpas que darán forma al gran comedor de Galicia -se montan en O Corgo- y en la celebración de la Junta Local de Seguridad previa al evento gastronómico, desarrollada ayer.

Mientras los operarios empezaban a levantar las citadas carpas, en el consistorio se reunían la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba; el alcalde, José Cacabelos; la edil de Turismo, Emma Torres; y representantes de Policía Local, Policía Autonómica, Servicio Municipal de Emergencias y Guardia Civil.

Este último cuerpo brindará colaboración absoluta, tal y como destacó la propia Larriba antes de cifrar en 18 las patrullas del instituto armado que actuarán en O Grove durante la fiesta, junto con las patrullas de Tráfico y otros cuerpos y agentes que se ocuparán de controlar tanto la conducción bajo los efectos del alcohol como su venta a menores.

En los conciertos

Evidentemente la vigilancia será especialmente intensa durante los fines de semana y el puente festivo del Pilar, así como en el entorno de los espacios que albergarán los conciertos nocturnos, donde suelen darse cita los más jóvenes asistentes al evento culinario.

Igualmente está prevista la instalación de un "Punto Morado" para luchar contra la violencia de género y concienciar a la sociedad en relación con este problema.

La subdelegada del Gobierno se fue de O Grove con un "mensaje de seguridad", incidiendo en que la Festa do Marisco se presta al disfrute por parte de todos "en un marco incomparable y con los mejores productos de nuestro mar".