La Coordinadora de las ANPA de Vilagarcía ha celebrado la reunión de fin de curso para poner sobre la mesa las necesidades de los centros educativos del municipio con la mirada puesta en que las administraciones las solucionen durante las vacaciones de verano. Además de obras urgentes para adecentar los edificios educativos, las asociaciones de padres también coinciden en reclamar a la Consellería de Educación una mayor celeridad para poner en marcha las clases de refuerzo por las tardes -Plan PROA (Programas de Refuerzo, Orientación y Apoyo)-, pues cada curso comienzan más tarde, incluso en el mes de enero. "Pedimos que empiecen en septiembre", sostiene Marcela Diz, portavoz de la Coordinadora.
Otra de las demandas comunes de las ANPA tiene que ver con el consumo eléctrico. Concretamente solicitan al Concello de Vilagarcía -con competencias en el mantenimiento de las instalaciones- que elabore un estudio de ahorro energético de todos los centros públicos de la ciudad. "Un gran porcentaje del presupuesto de los colegios se va en calefacción y electricidad", aduce la representante del colectivo. Considera que sería buena idea colocar luces led, que consumen menos que las tradicionales.
En lo que se refiere al PROA es un programa de clases de refuerzo que se imparten dos tardes a la semana a alumnos de tercero y cuarto de Primaria en grupos de un máximo de 15 niños. Los de quinto y sexto también asisten juntos a las clases, con igual cupo. Los tutores de los alumnos son los que deciden los que necesitan apoyo educativo o no.
En cuanto a las obras, la recién dimitida ANPA de Carril es una de las que solicita mejoras. Concretamente la renovación de los obsoletos aseos del colegio, algunos de ellos con inodoros sin tapa, sin puerta... La consellería ya se comprometió públicamente a ejecutar la obra, siempre y cuando el Concello colaborase económicamente con la misma. Los padres de Carril esperan que Educación cumpla su palabra y lleve a cabo los trabajos aprovechando los meses de verano para no interferir en las clases.
La ANPA del colegio Rosalía de Castro de Carril consiguió este curso que la Xunta sustituyese las viejas tuberías tras alertar de la mala calidad del agua. De hecho los análisis evidenciaron que los niveles de hierro eran muy superiores a los legalmente permitidos. El Concello se encargó de dotar al alumnado de agua embotellada mientras Educación no realizaba las obras. Tras la presión de los padres, Educación acabó cediendo.
Ahora las familias esperan que se cambien los aseos, así como la carpintería (puertas y ventanas).
La portavoz de la Coordinadora de ANPA de Vilagarcía, Marcela Diz, aprovecha la ocasión para solidarizarse con la asociación de padres de alumnos del colegio de Carril, la cual acaba de presentar su dimisión, cansada de los conflictos con la dirección del colegio y con la administración autonómica.
En lo que respecta al CEIP de Vilaxoán, la propia dirección del centro ha solicitado el pintado de varias estancias de las instalaciones, el mantenimiento del depósito de gasoil y el cambio de las tuberías. En este último caso, la Consellería ya se comprometió a renovar las canalizaciones, aunque solicita al Concello la mano de obra, según relata Marcela Diz en base al escrito que la Coordinadora ha recibido del colegio de Vilaxoán.
