El ente público Portos de Galicia, titular de los terrenos donde tradicionalmente se celebran las fiestas de Carril, responsabiliza al Concello de Vilagarcía de la situación creada porque dice que hasta el año pasado era la administración municipal la que realizaba las peticiones de ocupación de espacio para las celebraciones en esta villa marinera. Pero el caso es que las fiestas son realizadas desde hace años por asociaciones culturales legalmente constituidas y ellas mismas se encargan de gestionar los espacios que van a ocupar en espacios públicos de titularidad portuaria.
Como ya explicaron los representantes de las comisiones de fiestas, este año, al igual que lo hicieron el año pasado presentaron en Portos de Galicia la solicitud de autorización para la ocupación de espacios durante las fiestas de Santiago Apóstol, San Fidel, y Ameixa Rock (cada comisión tiene su asociación cultural). Como en ocasiones anteriores acreditaron estar en posesión de un seguro tal como exige Portos, además del escrito del Concello que garantiza la seguridad y orden público durante las celebraciones. Esperaban poder liquidar el pago de la tasa correspondiente por ocupación del espacio solicitado, que quedó marcado en un mapa, también adjuntado a la solicitud, como en años anteriores. El problema fue que Portos de Galicia les envió un nuevo escrito indicando que, además, debían presentar un aval o garantía, que como mínimo es de 3.000 euros.
Este requisito es exigido por primera vez y nunca lo abonó el Concello de Vilagarcía, como se afirma desde Portos de Galicia.
Por parte municipal se ha cursado una solicitud de entrevista el pasado martes por teléfono y por correo electrónico con el presidente de Portos para tratar de aclarar la situación y buscar una solución negociada.
El presidente de Portos regresó ayer de viaje y ofreció una cita para mañana, pero el alcalde ya tenía su agenda ocupada, por lo que la reunión se celebrará el martes al mediodía.