Los trabajos de mantenimiento de las juntas de dilatación de los viaductos de la vía rápida de Cambados a Ribadumia (VG-4.2) provocaron ayer importantes retenciones de tráfico. A primera hora de la tarde se estaban realizando obras a la altura del puente sobre el río Umia, ya llegando a Barrantes, por lo que la circulación se regulaba únicamente por un sentido, mediante semáforos de obra.

La densidad de vehículos que había en esos momentos propició que en algunos momentos las caravanas tuviesen una longitud de varios centenares de metros. Según un conductor, el tramo entre la rotonda de Vilariño y la de Os Castaños le llevó ayer más de 20 minutos. Estos trabajos son necesarios para el mantenimiento de las juntas, cuya misión es absorber los movimientos inevitables de una estructura como es un viaducto.

Asimismo, la Consellería de Infraestructuras de la Xunta de Galicia, titular de esta vía, adelanta que próximamente se van a realizar trabajos de mejora del firme tanto en esta misma vía rápida, como en la VG-4.3, que es la que comunica Cambados con Vilagarcía.

Se trata, en ambos casos, de viales con una densidad de tráfico muy elevada, que aumenta todavía más durante los meses de verano, de ahí que estos trabajos pueden afectar también a la circulación de vehículos en una época sensible.

La Xunta de Galicia ya invirtió el año pasado 650.000 euros en obras de asfaltado y pintado de varios viales de O Salnés.