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La Diputación implantará la Zona 30 en el vial de San Vicente a partir de octubre

La remodelación a la que se está sometiendo la carretera se paralizará durante el verano para evitar molestias -La actuación se centra en el entorno de la iglesia parroquial

Visita de Benítez, ayer, a las obras del vial de San Vicente. // Muñiz

Reducir la velocidad para que puedan convivir peatones y turismos es el objetivo que persigue la Diputación de Pontevedra con las obras de remodelación que está acometiendo en 900 metros de la carretera de San Vicente, en O Grove. La actuación, que ayer visitó el diputado de Mobilidade de la institución provincial, Uxío Benítez, se centra en el entorno de la iglesia parroquial y estará finalizada a lo largo del mes de octubre. Una de las cuestiones que anunció Benítez en su visita es que las obras van a estar paralizadas durante el verano, para intentar causar las mínimas molestias posibles a los usuarios de los arenales de la zona, retomándose la actuación a lo largo del mes de septiembre.

En estos momentos, ya se encuentra finalizado todo el ensanche de la sección de la plataforma, las canalizaciones de telefonía y la electricidad, así como la instalación de tuberías de saneamiento y pluviales. Benítez recordó en su visita que la actuación también incluirá una senda de 2,5 metros de largo, delimitada por elementos de iluminación y con rodadura diferente de hormigón, así como zonas de convivencia de peatones y coches sobreelevadas en las que habrá prioridad peonil y los vehículos no podrán superar los 20 kilómetros hora.

Como elementos de seguridad viaria, se van a instalar cinco pasos de peatones sobrelevados y diez reductores de velocidad de vehículos. Además, se incluirá la demolición de parte de una construcción en una curva muy cerrada que impedía la visibilidad para los conductores. Desde el ente provincial recuerdan que la obra incluirá la reforma del entorno de la iglesia de San Vicente, creando una nueva plaza con diferentes pavimentos delimitados por bolardos, dejando un espacio de acceso exclusivamente peatonal.

El presupuesto de la obra, más de 540.000 euros, se financiará gracias al convenio de colaboración firmado entre la Diputación y el Concello, aportando la institución provincial el 80% y la municipal el 20% restante.

El alcalde de O Grove, José Antonio Cacabelos, destacó ayer que la reforma de esta carretera fue "una de las mejoras que el Concello reclamó de forma prioritario desde su llegada al gobierno; esta actuación era muy demandada por los vecinos y se convertirá en uno de los hitos de este mandato porque es algo que zonas rurales como esta demandan". Es más, el regidor no dudó en señalar como positiva la decisión de paralizar la sobras durante el verano, al tratarse de una zona " en la que están algunas de las playas más visitadas del municipio".

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