A la sombra de los árboles, un apicultor explica a los niños que las avispas velutinas son un insecto invasor, y que es necesario luchar contra ellas si se quiere mantener las poblaciones de abejas, fundamentales para la polinización y la elaboración de la miel. Acto seguido, les muestra varias botellas de plástico, que son trampas caseras para atrapar a las avispas reinas. "Funcionan como la nasa del pulpo o de la nécora", les indica.

El año pasado, Protección Civil de Ribadumia retiró 350 nidos de "vespa asiática", una cifra que demuestra lo rápido que esta plaga biológica está colonizando el territorio. El Ayuntamiento y el colegio Julia Becerra Malvar han considerado que era necesario implicar a los niños para luchar contra la expansión de la velutina, y organizaron diferentes actividades en el centro educativo.

Hubo charlas y talleres para la elaboración de trampas caseras, en las que utilizaron simples botellas de plástico, en las que se coloca un poco de vino o cerveza como atrayente. Durante la jornada, se le puso el colofón al proyecto -al menos en lo que respecta a este curso-, con una visita al pazo de Quinteiro da Cruz, en Lois, donde los niños asistieron a la charla del apicultor y colocaron sus trampas.

Estas estaban elaboradas con los envases más variopintos, como garrafas de cinco litros de agua o botellas de litro y medio de refresco. El apicultor les explicó que cuando una avispa entra en ellas por la abertura ya no saben salir, "porque lo que hacen es buscar la luz, y como la botella es transparente chocan una y otra vez contra las paredes, hasta que se agotan".

Les pidió que levantasen la mano todos los que habían tenido un nido de "vespa asiática" cerca de sus casas o de las casas de parientes cercanos, y fueron muchos los que contestaron afirmativamente.

"No tenemos que tenerles miedo -añadió el productor-. El problema que podemos tener con las velutinas es si les vamos al nido".

Acudieron a la visita unos 40 niños, de los 140 que participaron en el programa de concienciación escolar sobre esta especie invasora. En los talleres confeccionaron 130 trampas, algunas de las cuales las colgaron ayer en los jardines del pazo de Quinteiro da Cruz. Las demás las llevarán para sus casas y huertas familiares.

Programa comarcal

La Mancomunidade do Salnés puso este año en marcha un programa pionero para intentar controlar la expansión de la velutina en la comarca, consistente en la colocación de hasta 1.800 trampas para capturar a las reinas.

En Ribadumia, la empresa contratada colocó unas 300, fundamentalmente en los puntos que le señalaron los voluntarios de Protección Civil como los más propicios para este insecto.

Se dio la circunstancia de que una buena parte de los artefactos fueron colgados en los árboles de ribera del río Umia, y esa misma tarde una o más personas los robaron. Algo que indignó a Protección Civil, que recuerda que la lucha contra la velutina afecta a todos.