Una propuesta de Canadá hizo que la asamblea general de Naciones Unidas resolviera en 2008 que a partir del año siguiente iba a conmemorarse cada 8 de junio el Día Mundial de los Océanos, con la intención de concienciar a la población de todo el planeta sobre la importancia que tienen los mares para la existencia de los seres vivos.

En ello inciden desde O Grove entidades como BDRI, donde saben de la importancia de este tipo de acontecimientos para buscar la implicación de los ciudadanos.

"Limpiemos nuestros océanos" es el lema empleado en esta efemérides, en la cual se incide en la necesidad de prevenir la contaminación derivada de la presencia de los plásticos en el agua. Es por ello que salen a relucir cifras dramáticas, como por ejemplo que el 80% de la contaminación en los océanos está causada por el hombre, estimándose que cada año llegan a los océanos ocho millones de toneladas de plástico.

Parece que la contaminación que genera este material mata anualmente a un millón de aves marinas y a 100.000 mamíferos marinos, siendo incalculable la cantidad de peces que comen ese plástico y que acaba consumiendo el ser humano, tal y como advierte el director del BDRI, Bruno Díaz.