Tras varios años demandando la medida, los vecinos de Bamio dispondrán este mes de semáforos para regular el paso de los peatones en el problemático cruce de O Salgueiral. La señalización luminosa en el vial de titularidad autonómica será instalada por la Administración municipal con el visto bueno de la Xunta.

El Concello de Vilagarcía de Arousa comenzó los trabajos de instalación de los equipos semafóricos con los que se resolverá un problema de inseguridad vial en un punto complicado por el que atraviesan muchos peatones, debido a que allí se emplaza la parada del transporte escolar y se encuentra el centro de formación marítima. La Administración Local asume el coste íntegro de la compra de material e instalación de los semáforos, con un presupuesto de 18.000 euros.

Los operarios municipales comenzaron ayer los preparativos para colocar los semáforos. Se están construyendo las bases sobre las que se fijarán las columnas y también las canalizaciones por las que irá el cableado eléctrico.

Una vez finalizada la obra, se procederá a acometer la instalación eléctrica y, por último, se colocarán y conectarán los semáforos y se pintará el paso de peatones. La previsión es que la nueva regulación semafórica esté en funcionamiento de cara a finales de este mes.

La dotación de medidas de seguridad en este punto de O Salgueiral es una vieja demanda de los vecinos de la zona que el ejecutivo que preside Alberto Varela adoptó como prioritaria desde el principio del mandato.

Tras varias conversaciones y reuniones con los responsables de Estradas de la Xunta de Galicia, después de estudiar otras medidas, como la instalación de bandas de frenado para reducir la velocidad de los vehículos, la administración autonómica vio con buenos ojos la instalación de los semáforos como posible solución, aunque no comprometía el gasto de los mismos ni daba plazo concreto para hacerlo. Para no demorar más la cuestión y por tratarse de un tema de seguridad vial, el Concello de Vilagarcía de Arousa se ofreció a financiar la compra de los semáforos con fondos propios.

La medida cuenta con la autorización del departamento de Estradas de la Xunta de Galicia, que también informó sobre el emplazamiento idóneo del paso de peatones regulado por los semáforos, que se desplazó unos metros del inicialmente previsto para garantizar la seguridad, al encontrarse próximo a una curva con escasa visibilidad.