El centollo es una especie importante en Galicia. Queda claro si se tiene presente que en las dos últimas décadas se facturaron en lonja unos 55 millones de euros por la comercialización de aproximadamente cinco millones de kilos de esta especie; en concreto 5.319 toneladas desde el ejercicio 1997, incluido.

La referencia al hablar del "rey de los mariscos" se encuentra en las lonjas de O Grove, A Coruña, Vigo y Ribeira, ya que por sí solas alcanzan prácticamente el 60% del movimiento total en primera venta.

La grovense se lleva la palma, ya que desde 2001 comercializó 710 toneladas de este preciado producto e ingresó por ellas unos once millones de euros, mientras que A Coruña se queda en diez millones de euros tras vender mil toneladas.

En el mismo periodo Ribeira se acerca a las 800 toneladas -son datos aún provisionales- y a ocho millones de euros, situándose la rula de Vigo con 350 toneladas y cuatro millones de euros, desde 2001.

Puestos a analizar por años naturales el resultado de la pesca del centollo en tales puertos puede destacarse que O Grove ya superó en el presente ejercicio las 26 toneladas -y eso que lo importante está por llegar, en noviembre y diciembre- después de rozar las 66 toneladas en 2017 (950.000 euros), sin duda el mejor año de su historia.

En la rula meca pueden destacarse, igualmente, las casi 59 toneladas de centollo vendidas en 2009, las 56 toneladas de 2012, las 45 de 2015 o las 42 toneladas del año 2005.

En A Coruña también se estableció una cifra récord de descargas en 2017, con 105 toneladas, por encima de las 103 toneladas de 2006 o las 79 toneladas de 2012.

En la lonja de Vigo se aprecia mucho mejor el buen momento del centollo, ya que las 25 toneladas vendidas en lo que va de año superan ya el total de muchos de los ejercicios naturales de las dos últimas décadas.

Además las 54 toneladas de centollo de 2017 pulverizaron todos los registros, puesto que hasta entonces el máximo alcanzado habían sido las cerca de 32 toneladas de 2009.

Ribeira también marcó en 2017 sus mejores registros, con 62 toneladas, después de haber superado las 60 toneladas de centollo en 2012 y rozar las 58 tanto en 2005 como en 2009.

Lo cierto es que la evolución ha sido notoria en los últimos años en el conjunto de Galicia hasta llegar a las 5.319 toneladas totales subastadas desde 1997.

Aquel año únicamente se subastaron, en todo el ejercicio, 117 toneladas. Es decir, 52 toneladas menos que lo alcanzado desde el pasado 1 de enero hasta la actualidad.

Los mejores ejercicios naturales fueron 2005, con 352 toneladas; 2006, que superó las 382 toneladas; 2009, con casi 345 toneladas de centollo; y 2012, cuando se rebasaron las 334. Y aún así todos ellos se quedaron lejos de las casi 456 toneladas distribuidas en 2017.

Evidentemente los mejores meses para la flota que se dedica a la pesca del centollo son noviembre y diciembre, que es cuando comienza la temporada que se prolonga hasta el verano siguiente, y cuando ejerce todo su tirón el mercado navideño. En los dos últimos meses del año pasado, por ejemplo, se subastaron 348 toneladas.