El Ayuntamiento de Cambados prevé que en breve estén en marcha dos mejoras solicitadas por algunos de los emprendedores presentes en el vivero de empresas del polígono industrial de Sete Pías. Se trata en concreto de la instalación de internet por cable y de una alarma propia para la zona del edificio ocupada por el vivero y la asociación de empresarios.
Al menos uno de los emprendedores se quejó de que el concejal de Promoción Económica, Xurxo Charlín, les prometió hace varios meses que se les iba a instalar internet de alta velocidad -actualmente tienen una wifi compartida- y una alarma propia, pues ahora mismo el edificio solo cuenta con la del bar, de modo que cuando el establecimiento hostelero está cerrado, los emprendedores no pueden acceder a sus locales. Pero ninguna de estas mejoras ha llegado a concretarse.
Sobre esto, Charlín indica que en el caso de la alarma se va a desdoblar, de modo que el bar tenga una y la zona del edificio social donde se encuentran el vivero y el local de la asociación, otra. Apuntó que ya se van a iniciar los trámites con la empresa de seguridad para acometer dicho cambio en el sistema. En lo que se refiere al servicio de internet, el edil explica que se hizo la canalización para llevar el cable, pero que cuando se asfaltó la explanada para pintar las plazas de aparcamiento, se produjo un repisamento del terreno, lo que afectó a la canalización de la fibra.
Por ello, el Concello tuvo que abrir de nuevo la zanja y arreglar los desperfectos. Ese paso ya se ha dado, y ahora solo queda que el instalador de la compañía de telecomunicaciones acuda al centro a realizar la conexión. En ese momento, los emprendedores podrán disfrutar de una velocidad de navegación de 300 megas.
Otra queja es la referida a la falta de aire acondicionado en el centro, ya que fuentes consultadas por FARO indican que Charlín les prometió esta mejora hace algo más de un año, aunque, eso sí, ya les avisó de que dependería de las posibilidades presupuestarias del Concello, pues la obra necesaria es costosa. A este respecto, el edil apunta que en estos momentos la opción más viable desde el punto de vista económico es la de habilitar algún equipo portátil de frío.
La existencia de insectos también ha generado malestar, y lo que hizo el Concello fue contratar un servicio de limpieza a la semana con una empresa del ramo, que se encarga de la puesta a punto de las zonas comunes. También acudió una firma especializada en plagas. Charlín destaca la gestión municipal, con 25.000 euros invertidos en mejoras en mobiliario y equipos informáticos. Otros viveristas consultados por FARO apuntan que la situación en el centro es satisfactoria en términos generales.
