La lista definitiva del concurso de traslados de médicos se hizo efectiva ayer mediante su publicación en el Diario Oficial de Galicia, por lo que las bajas que se producirán en el servicio de Urología y en Medicina Interna del Hospital Comarcal do Salnés se harán efectivas a partir del día 28. Lo más grave es en la primera de las especialidades porque se van los dos médicos que la atendían y la gerencia del área sanitaria solo ha podido confirmar que tiene comprometida una contratación para cubrir una de las plazas.
De no conseguir otro especialista, con un solo médico solo podrán atenderse las consultas por lo que tendrán que derivarse pacientes al Complejo Hospitalario de Pontevedra.
En el caso de Medicina Interna son dos los profesionales que causan baja en el centro hospitalario comarcal por concurso de traslados. Una de ellas podrá cubrirse con la contratación del médico que ahora trabaja por guardias. Pero el servicio también quedará en breve sin otro profesional ya que hay una médico embarazada a punto de cogerse la baja por maternidad.
La situación preocupa a los miembros de la junta de personal que consideran que el Sergas debería ofrecer incentivos a los profesionales para que elijan las plazas vacantes de difícil cobertura o en centros hospitalarios pequeños.
La parte positiva está en que en el concurso de traslados aparece la incorporación de especialistas. Se trata de un profesional en radiodiagnóstico; en obstetricia y ginecología; cirugía general; otorrinolaringología y rehabilitación. Los médicos causan baja el día 28 y tienen tres días para incorporarse a su puesto de trabajo si es en otro centro de la misma área sanitaria.
Presión asistencial
Por otra parte, los servicios de urgencias del PAC de San Roque y del Hospital Comarcal do Salnés han registrado un importante incremento de la actividad asistencial en los últimos días.
Las asistencias en el centro hospitalario se disparan diariamente y superan los 120 casos.
En el PAC de San Roque, al haber días festivos y producirse la baja de algunos médicos en las consultas de atención primaria, la presión asistencial se disparó tanto en adultos como en niños.
