El presidente del PP de Vilagarcía, Alfonso González Gallego, ha hecho balance de su primer año como líder de la formación conservadora, lo que ha levantado las críticas del gobierno local.

Gallego califica este primer año de "tremendamente positivo" al considerar que "se ha cumplido el compromiso adquirido de renovación en el seno del partido, de generar ilusión con nuevos proyectos y de unión de la familia popular vilagarciana".

El presidente popular añade que también se ha cumplido el "compromiso con las demandas de la ciudadanía, especialmente en las distintas parroquias" y se erige como voz de las peticiones vecinales "como las de Rubiáns, Castroagudín, O Piñeiriño o Trabanca Sardiñeira; quejas como las de las directivas del San Martín o del campo de Berdón, proyectos de fines sociales como los de la Fundación Lar y de infraestructuras como la variante de A Torre-Trabanca".

Alfonso Gallego dice que "el PP ha sabido hacer autocrítica y apuesta por una oposición dura en la fiscalización pero constructiva en la búsqueda de soluciones". "Es un honor capitanear un equipo como el del PP", saca pecho.

Las declaraciones del presidente del PP han provocado reacciones en el gobierno socialista. Su portavoz, Tania García, considera que las palabras de gallego "vienen a demostrar que el nuevo PP sigue siendo el viejo PP, y no solo en las caras de sus integrantes, sino también en las formas de actuar, basadas en crear conflicto y en repetir cien veces una mentira para que la gente crea que es realidad".

En cuanto al compromiso con los vecinos, la portavoz socialista insta a Gallego a que explique a los vilagarcianos "donde estaba ese "compromiso claro" del PP local con las demandas de la comunidad escolar de Rubiáns cuando pedían un gimnasio", con O Piñeiriño cuando solicitaba un comedor escolar o con la de Carril cuando reclamaba el arreglo de los ruinosos aseos.

También echa en falta Tania García el apoyo del PP a los vecinos y profesionales de la sanidad en la demanda del "necesario nuevo centro de salud para Vilagarcía", en las protestas por la eliminación del área sanitaria de O Salnés o en la defensa de los pensionistas.