La de ayer fue una jornada de playa, no cabe duda. La subida de las temperaturas hizo que los arousanos no se lo pensaran dos veces y decidieran darse un buen chapuzón, o al menos relajarse en la orilla de sus playas o acercarse a sus paseos marítimos.

En cierto modo lo vivido en este primer fin de semana de mayo en O Salnés y Ullán fue una especie de anticipo del verano. Y lo fue por muchos aspectos; tanto por la posibilidad de acudir a las playas como por la celebración de multitud de eventos socioculturales, en ambos casos gracias al buen tiempo.

No es de extrañar que muchos aprovecharan al máximo para efectuar ese acercamiento a las principales zonas de baño, que se apreció especialmente en Vilagarcía, O Grove, Vilanova y A Illa.

Como lo aprovecharon para recorrer zonas históricas como la villa de Cambados y espacios naturales de interés, ya fuera en Meis, Ribadumia, Meaño o los municipios del Ullán.

A la visita a tales lugares y a que se llenaran zonas peatonales, terrazas de los bares y restaurantes contribuyó el hecho de que desde primera hora de la mañana ya se notara calor.

Tanto es así que a mediodía las estaciones meteorológicas de Tremoedo (Vilanova) y Pé Redondo (Meis) estaban en 23 grados, con Barrantes (Ribadumia), Simes (Meaño) y Armenteira (Meis) acercándose a los 22, mientras que el mercurio marcaba 20 grados en A Lanzada (O Grove).

Y lo mejor de todo era que la sensación térmica a esa hora era ya de 25 grados en A Lanzada y Simes, con los demás puntos moviéndose entre los 23 y los 24 grados.

A las cuatro de la tarde todas las estaciones se situaban entre los 23 y los 25 grados centígrados reales, que fue la máxima del día en todas ellas salvo en Armenteira y Corón (Vilanova de Arousa), que se quedaron en 24.

Aunque bien es cierto que independientemente de lo que indicaban los datos oficiales de Meteogalicia en determinadas zonas y momentos del día se superaron con creces esos registros.