A las dos de la tarde se produjo otro incendio urbano, en esta ocasión en la aldea de Casal do Eirigo, que pertenece al municipio de Valga. Éste se declaró en la habitación de un galpón que su dueño estaría utilizando como almacén o trastero, pues según el Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de Valga, en el interior hay desde coches viejos hasta televisores o una cama. A falta de que se concreten las causas del siniestro, se sospecha que las llamas empezaron a consecuencia de un cortocircuito eléctrico, dado que la instalación es muy antigua.

Los servicios de emergencia indican que ardieron además de varios electrodomésticos, parte de la cubierta de uralitas. Se vieron afectadas asimismo algunas paredes. También participaron en la extinción los Bomberos do Salnés, y acudió igualmente al operativo la Guardia Civil.