Los propietarios del restaurante cacereño Atrio, Toño Pérez (jefe de cocina) y José Polo (jefe de sala) recogerán mañana en Santiago -a las 12.30 horas- el XVI Premio Nacional de Gastronomía Tradicional "Lola Torres" convocado por la Fundación Amigos de Galicia en el que colabora el Concello de O Grove, la Axencia de Turismo de Galicia de la Xunta y el Centro Superior de Hostelería de Galicia.

Antes de recoger el galardón, los hosteleros extremeños serán recibidos esta tarde en el municipio meco por el alcalde, José Antonio Cacabelos, que les hará entrega de un Diploma de Honor por su visita a O Grove y como ganadores del "Lola Torres". Toño Pérez y José Polo visitarán el puerto grovense y estarán con los responsables de la cofradía de pescadores.

El jurado ya falló el premio el pasado mes de octubre. Así, Atrio, de Cáceres, se alzó como ganador de entre un total de 137 candidaturas, la mayoría procedentes de Euskadi, Madrid y Andalucía, además de Portugal.

El restaurante extremeño, apadrinado por la prestigiosa asociación Hoteles Relais & Chateaux, ofrece la mejor cocina de dicha comunidad durante todos los días del año además de contar con una gran bodega subterránea que permite saborear los mejores vinos y cavas de España, según expuso el jurado en su calificación final.

El jurado destaca en esta edición el papel que aportan al restaurante Atrio su jefe de cocina Antonio Pérez y el jefe de sala y de bodega, José Polo, ambos propietarios del establecimiento.

Los responsables de la decisión señalan que en este restaurante destaca "su cocina tradicional, con las innovaciones propias de nuestra época, en lo que se refiere tanto a la gastronomía como al espacio físico del restaurante".

Además, el jurado valora "el uso y defensa que hacen en sus cocinas de los productos de su tierra, platos presididos por el cerdo, los quesos, la huerta, el pimentón de la Vera, etc., productos que aportan personalidad y autenticidad a todas sus elaboraciones".

Otro de los méritos que el jurado resaltó se refiere a la rehabilitación del edificio donde se asienta el restaurante, pues el espacio y el respeto a la cultura e historia de las ciudades es fundamental para ofrecer un servicio de alto nivel en una ciudad declarada como Patrimonio de la Humanidad.

En este sentido subrayan que la arquitectura de Atrio se integra en el corazón histórico de Cáceres. Revelan que el establecimiento inició su andadura en el año 1986 pero fue en noviembre de 2010 cuando inauguran lo que sus propietarios consideran su "sueño vital". Se trata de un restaurante en pleno casco histórico que está incluido en la prestigiosa marca de calidad "Relais & Chateaux" y que se caracteriza por su singular arquitectura, obra de Emilio Tuñón Álvarez y Luis Moreno Mansilla.