A Illa volvió a demostrar en la noche de ayer que su vínculo con las actividades culturales es cada vez más potente. Lo vivido en el Auditorio con el estreno de "Ficciónate" no hace más que confirmar ese protagonismo de la localidad arousana como lugar propicio para lo relacionado con las artes.

El ciclo de cortometrajes puesto en práctica hace ahora tres años por parte de la productora Abella Creativa ha instalado en el Auditorio de A Illa su base de operaciones. Uno de sus responsables Andrés Rozados apuntó al respecto que "arrancamos la primera edición allí y nos fue siempre bien. Nos sentimos como en casa y el Concello está haciendo un gran trabajo en favor de las actividades culturales y eso se demuestra con todo lo que se hace allí y la buena acogida que tiene".

Rozados también se refiere al inicio de este ciclo de cortos que recorre diferentes ayuntamientos de Galicia cada año como una idea "que surgió de Olalla Diéguez y yo. Teníamos un corto "Fálame do Silencio" de Lois Blanco y hablamos de que sería un buen sitio para estrenarla en A Illa y esa experiencia fue muy buena".

Ahora Ficciónate se ha convertido en un muy buen escaparate para mostrar los muchos talentos que se mueven en el audiovisual gallego. El sentido itinerante de esta idea consigue además que las producciones lleguen a un importante número de espectadores. Concretamente, esta tercera edición, también tiene cerradas fechas en A Coruña, Melide, Sarria, Ribadeo o Fisterra.

La calidad de los trabajos emitidos ayer se refleja en el hecho de los 26 cortos que se presentaron a la selección previa. Las películas seleccionadas por un jurado que conformado por los directores Pablo Cacheda y Adriana Páramo, y por los productores y organizadores Miguel Díaz y Andrés Rozados, fueron: Lurna, de Nani Matos; Quinta Provincia, de Miguel Canalejo; Matria, de Álvaro Gago; Zugwang, de Diego Markwalder Gato; y Perversa Lola, de Sonia Méndez.

Destaca entre los seleccionados "Matria", un excelente trabajo que incluso ha sido premiado en el Festival de Sundance en Estados Unidos y que cuenta la historia de Ramona, que trabaja en una conservera arousana gobernada por una encargada maléfica. Además la actriz protagonista es Francisca Iglesias, natural de A Illa y que fue de las más ovacionadas en la velada de ayer. Su excelente trabajo interpretativo, pese a no ser profesional de la interpretación, también fue reconocido en el Festival Alcine de Medina del Campo a finales del pasado año.

Los cinco cortometrajes abordaron diferentes historias todas ellas muy bien contadas y con una calidad audiovisual fuera de toda duda. Aspectos como la inmigración, los choques culturales, los desengaños o situaciones cotidianas, fueron algunos de los hilos en los que se centraron los cortometrajes, todos ellos con una amplia aprobación por parte del público presente en el Auditorio.

Al término de las proyecciones se celebró un animado debate que contó con la presencia de todos los directores a excepción de Sonia Méndez por razones de agenda.