Los dos partidos judiciales de O Salnés (Vilagarcía y Cambados) tramitaron durante el pasado año casi 300 divorcios, según la estadística difundida ayer por el Consejo General del Poder Judicial. Entre ambos partidos, donde más rupturas matrimoniales se registraron por la vía judicial, fue el de Cambados. Así, en la Vila do Albariño se produjeron 71 divorcios consensuados, y 77 en los que no hubo acuerdo entre las partes.
En lo que atañe a Vilagarcía, durante el año pasado se rompieron en el juzgado 78 matrimonios por la vía amistosa, y en otros 61 casos el procedimiento exigirá la intermediación de la autoridad judicial.
La cifra de rupturas matrimoniales es muy inferior en el partido de Caldas -al que pertenecen las localidades de O Salnés-, algo lógico dado que su población está también muy por debajo de la de los municipios del área de influencia de Cambados y Vilagarcía. Así, en Caldas se tramitaron durante los últimos doce meses 69 divorcios, de los cuales 39 fueron consensuados, y en otros 30 no se llegó a acuerdo entre las partes.
Según las cifras recopiladas por el Poder Judicial, entre los tres partidos, en 2017 se produjeron un total de 356 divorcios, siendo la mayoría (188) de mutuo acuerdo. En los 168 restantes los términos de la ruptura generaron discrepancias entre los cónyuges, de ahí que tenga que intervenir la autoridad judicial en el reparto de bienes y responsabilidades.
Separaciones
Entre los partidos de Cambados, Vilagarcía y Caldas hubo el ejercicio pasado 16 separaciones. De nuevo, fueron mayoría las consensuadas, 11 contra 5.
Una vez más, Cambados aventaja a Vilagarcía en número de parejas que iniciaron los trámites para la disolución de su relación. Así, en el municipio de Cambados los juzgados dieron trámite a cinco separaciones de mutuo acuerdo, y a dos sin acuerdo. En Vilagarcía, por su parte, hubo tres separaciones amistosas y dos con litigio. Finalmente, la estadística sigue la misma tónica en Caldas, con tres rupturas acordadas entre las partes, y una en la que tendrá que ser una sentencia judicial la que establezca las nuevas condiciones de la relación.
Finalmente, el Consejo General del Poder Judicial apunta que durante el año pasado no se dio ninguna nulidad matrimonial en ninguno de los juzgados que afectan a O Salnés y Ullán. Este es un trámite civil que invalida el matrimonio porque se ha producido un defecto formal grave en su trámite.
