El infrautilizado Museo do Ferrocarril de Vilagarcía (Mufevi) inicia el camino para salir de su letargo. El alcalde, Alberto Varela, y el concejal de Turismo, Juan Antonio Pérez Callón, aprovecharon su visita la semana pasada a Fitur, en Madrid, para solicitar a la Fundación de Ferrocarriles Españoles (FFE) la cesión de nuevo material expositivo con el que dar un nuevo impulso al museo vilagarciano, que lleva años de capa caída. Prueba de ello es que el pasado agosto -mes turístico por excelencia-, el edificio recibió tan solo 24 visitas.
El regidor y el concejal socialistas hablaron con el presidente de la FFE, Carlos Abellán, para concertar una entrevista con el gerente de Protección de Bienes Históricos Ferroviarios de la Federación, Miguel Jiménez Vega, pues este departamento se encarga de localizar, catalogar y conservar todo tipo de elementos relacionados con los ferrocarriles.
Varela y Pérez Callón defendieron en la reunión "la importancia histórica y simbólica" que tiene el Museo do Ferrocarril de Vilagarcía, ya que su sede es la estación de la primera línea de tren de Galicia, que comenzó a funcionar en 1873 entre Corme y Carril.
Los responsables de la FEE se comprometieron a estudiar la propuesta y ver qué posibilidades existen de ceder material de su fondo para exponer en Vilagarcía y que se ajuste a las características de las instalaciones existentes.
Moción de Somos y EU
Las gestiones del gobierno socialista responden a la moción aprobada en el pleno municipal hace menos de un mes, en la que Esquerda Unida y Somos Maioría solicitaban una revitalización del museo con nuevos contenidos. Proponían la realización de actividades didácticas, exposiciones, concursos, etc. relacionados con el ferrocarril y su conexión con Vilagarcía como tema central para convertir el museo "en un espacio cultural de referencia y en un punto de interés turístico más de nuestra villa".
El propio alcalde admitía en esa sesión celebrada el 28 de diciembre que ese edificio cultural "necesita nuevos aires", por lo que se comprometió a dinamizarlo con más actividades. Y en cuestión de veinte días ya se ha puesto manos a la obra. Se trata de los primeros pasos para que el Museo do Ferrocarril deje de estar muerto.
El museo se encuentra ubicado en la avenida de Rosalía de Castro, en el acceso norte de Vilagarcía. Fue inaugurado hace más de una década, en junio de 2006, durante el último mandato del socialista Javier Gago, alcalde de la capital arousana durante dieciséis años.
Las obras en la vieja estación de tren de Carril para destinar el inmueble a la historia ferroviaria supuso una inversión de 245.000 euros que se suman a los 291.000 que absorbió el equipamiento telemático del museo y del Centro de Interpretación de la Ría de Arousa (CIRA) en conjunto. Ambos edificios, separados por escasos metros, fueron inaugurados el mismo día, el 23 de junio de 2006. En el mobiliario de sendos inmuebles se invirtieron 57.570 euros.
En aquel momento, tanto el Museo do Ferrocarril como el CIRA (denominado coloquialmente como "acuario") ya estaban en funcionamiento desde hacía meses, pero el alcalde Gago decidió organizar una inauguración oficial para que ninguno de los dos edificios pasasen desapercibidos ante los ciudadanos. "Es un nuevo granito de arena en nuestro empeño de crear una ciudad puntera y de calidad", declaraba el regidor en aquel acto.
Decadencia e inexistencia
Sin embargo, hoy en día la situación es bien distinta. Once años después, el Museo do Ferrocarril languidece sin apenas contenido ni visitantes, y en cuanto al CIRA, ni siquiera existe, pues fue derribado en la primavera de 2016 por Costas del Estado. El actual gobierno de Alberto Varela -también socialista- defendió en todo momento la demolición del "acuario", ubicado en plena playa de Compostela, sobre la arena, lo que representaba una barrera en la fachada marítima de Vilagarcía.
Además, con el paso del tiempo el contenido no se fue actualizando lo suficiente, llegando a exponer hasta botellas de licor café, según dijo Alberto Varela en el último pleno, en el que se abordó la decadencia del Museo do Ferrocarril y la corporación pidió a la Xunta financiación para construir un centro de interpretación sobre la isla de Cortegada.
Actualmente el contenido del "acuario" que se pudo aprovechar se encuentra en instalaciones municipales, a la espera de un nuevo centro de interpretación.
En relación al contenido del Museo do Ferrocarril, antes de que abriese al público oficialmente en junio de 2006, previamente ya había sido visitado. Los primeros fueron los directivos del Museo Nacional del Ferrocarril, después los turistas de la ciudad inglesa de Falmouth y unos días antes de la inauguración, alumnos vilagarcianos de Educación Infantil. Los niños pudieron disfrutar de una maqueta ferroviaria y ver el audiovisual que contaba en tres dimensiones la historia de la llegada del tren a Vilagarcía. Aprendieron que la primera línea ferroviaria de Galicia llegaba a Carril, exactamente al museo que estaban visitando y que antiguamente fue la estación de tren.
