Vilagarcía inauguró ayer la Navidad con el encendido del árbol de luces de 17 metros de la Praza de Galicia en un acto "exprés" que empezó casi diez minutos antes de lo previsto. De hecho a la hora que debía comenzar -20.30 horas- ya había terminado. Ni discurso del alcalde, ni actuaciones artísticas ni florituras de ningún tipo. Una cuenta atrás -eso sí, en gallego y en inglés- para encender el cono de luces bajo una lluvia de confeti, una buena dosis de villancicos y poco más.

Además del cono lumínico, el único aliciente para los niños -los auténticos protagonistas de las fiestas navideñas- fue la presencia de Papá Noel, que llegó a la Praza de Galicia a bordo de un trineo. Ayudado de varias mamá noelas, repartió multitud de caramelos entre los asistentes para después subirse a un escenario en el que estuvo acompañado del alcalde de la ciudad, Alberto Varela, para activar el pulsador que iluminaría el árbol. Cinco, cuatro, tres, dos, uno.... Y el árbol se llenó de luces de colores, produciéndose acto seguido la tradicional ovación por parte del público. Como suele ser habitual, los niños se hicieron la foto junto a este cono de luces que presidirá la Praza de Galicia hasta Reyes.

La afluencia en la plaza fue menor que la de años anteriores. Y es que las gélidas temperaturas no ayudaron demasiado. Además, el Concello anunció el encendido del alumbrado con un solo día de antelación.

De hecho no está colocada toda la iluminación en las calles previstas. Ayer se activó la de las zonas peatonales de Castelao y Rey Daviña, además del árbol de la Praza de Galicia. Las demás calles se adornarán en los próximos días.

El Concello firmó el contrato con Iluminaciones Santiaguesas hace unos días, por lo que a la empresa no le ha dado tiempo de colocar toda la ornamentación. No obstante, para favorecer las compras navideñas ya durante el puente el Ayuntamiento decidió adelantar parte del encendido a ayer.