El incendio del domingo en Armenteira empezó en Fofán, y en apenas 20 minutos había recorrido un par de kilómetros y amenazaba las viviendas de Gondes o As Pereiras. El fuerte viento reinante ese día por el paso del huracán Ofelia fue una de las razones de esa velocidad de propagación; otra, que el monte estaba lleno de maleza. El alcalde de Meis, José Luis Pérez, afirma que "tenemos que vigilar todos, porque todos estamos interesados en que no haya incendios", y anima a los vecinos a acudir al Concello a denunciar cuando vean parcelas abandonadas que puedan suponer un riesgo importante en caso de incendio.

La ley obliga a despejar de maleza las franjas forestales próximas a las poblaciones, y si los propietarios no cumplen con esta norma, los ayuntamientos tienen la potestad legal de hacer por su cuenta los desbroces y, posteriormente, pasar los gastos a los dueños de la parcela. Según José Luis Pérez, "tenemos en el Ayuntamiento a una persona dedicada única y exclusivamente a ese tipo de limpiezas, pero no teníamos ninguna constancia de denuncias en la zona donde se produjeron los incendios".

Está convencido de que tienen que ser los vecinos los que den la voz de alarma cuando vean fincas con mucha maleza para que de ese modo el Concello pueda tomar cartas en el asunto. "Lo primero que hacemos es requerir a los propietarios a que limpien la finca. Y si no lo hace es cuando entramos nosotros". "Pero tiene que haber un aviso de alguien -prosigue el alcalde- porque somos un ayuntamiento de 5.000 habitantes y no tenemos personal para inspeccionar un territorio de 50 kilómetros cuadrados".

El regidor, que se encuentra estos días fuera de Galicia por motivos de salud, incide en que la ley es clara al establecer que las fincas tienen que limpiarlas los propietarios, pero se muestra partidario de que el Concello actúe cuando los dueños hagan caso omiso o sea muy difícil contactar con ellos, por estar fuera, existir litigios entre herederos o constar la parcela como de propietario desconocido.

Por ello, y aunque es consciente de que las denuncias pueden generar un conflicto entre vecinos, les anima a dar el paso. "No hay que tener miedo a denunciar. Tener una finca abandonada al lado de casa puede ser muy peligroso".

José Luis Pérez se refirió también a preguntas de FARO al proceso de concentración parcelaria iniciado hace ya una década en Armenteira, y que afectaría a varias de las zonas que ardieron el domingo. El regidor admite que la parcelaria ayuda a luchar contra los fuegos, pues las fincas son más grandes y están mejor ordenadas, al tiempo que existen pistas anchas para el paso de los vehículos, pero considera que tampoco es la panacea. "En una situación extrema como la del domingo poco se puede hacer. Por eso la colaboración vecinal en la prevención es indispensable".

La concentración parcelaria de Armenteira se inició hace más de 10 años, y según José Luis Pérez está previsto que "salgan pronto las bases" iniciales del proceso.

La asociación de vecinos

El presidente de la asociación de vecinos de Armenteira, Martín Casais recuerda que "el domingo ardió en el mismo sitio que en 2006, por lo que opina que el Concello, "tiene que tomar cartas en el asunto". No obstante, considera que también son necesarias actuaciones más globales, "como darle más valor a la producción del campo. Porque si algo no da rentabilidad, lo más seguro es que termine abandonado".

Mientras tanto, los montes siguen humeando tras la catástrofe del domingo. Las lluvias de las últimas horas han reactivado el calor del terreno, de ahí que en algunas zonas de Xiabre, por citar un ejemplo, se perciban todavía columnas de humo blanco en un paisaje completamente cubierto por las cenizas.

Son muchos los vecinos que acuden estos días a hacer balance de los daños, mientras la Guardia Civil prosigue con las investigaciones para intentar dar con los culpables de los fuegos declarados en Armenteira y el monte Xiabre. En ambos casos, fueron incendios provocados, y se cree que empezaron en varios focos simultáneos.