La alcaldesa de Cambados, Fátima Abal, anunció ayer que la Diputación de Pontevedra ya ha aprobado la obra de reforma del cuartel de la Guardia Civil de la localidad. El ente provincial intentó firmar un convenio de colaboración con el Ministerio de Interior -titular de los cuarteles-, al igual que se hizo en otras actuaciones semejantes, como el acuartelamiento de Granada. Pero esta propuesta no salió adelante.

Abal explica que la Diputación asumirá igualmente la obra de Cambados, que está en la agenda política desde hace al menos 15 años. En su día llegó a estar proyectada y presupuestada por el Gobierno central, pero la crisis frenó la iniciativa, y año tras año se caía de los presupuestos del Estado.

La regidora hizo estas manifestaciones a preguntas de FARO al término de la celebración de la Virgen del Pilar, patrona de la Guardia Civil. Los agentes de Cambados acudieron a la misa en la iglesia de San Benito de Fefiñáns. Les acompañaron numerosos vecinos y representantes de la sociedad civil, como miembros de la corporación, como el caso de la alcaldesa o del portavoz del PP, Luis Aragunde; las juezas de Cambados; el fiscal David de la Fuente; el patrón mayor, Ruperto Costa; o el presidente de la asociación de comerciantes Zona Centro, Juan Rey.

Al término de la misa no se hizo el tradicional aperitivo, que se suspendió en toda España en solidaridad con los guardias desplazados a Cataluña.

En palabras del comandante del puesto de Cambados, el capitán Xosé Antonio Rivero Zobra, "todos los días del Pilar son especiales para nosotros, porque son una oportunidad de reencuentro y unión, con nosotros y con los vecinos". Además, admite que la cita de ayer era más emotiva si cabe por los guardias destacados en Cataluña. "Tenemos que estar unidos. Nuestro trabajo es muy duro, pero también reconocido en todas partes".

El paso para discapacitados

Una de las actuaciones que ejecutará la Diputación es la de mejorar la accesibilidad del cuartel, ya que actualmente una persona discapacitada que se desplace en silla de ruedas y quiera interponer una denuncia, tienen que recogérsela en el pasillo de entrada, al existir entre la entrada y la oficina de denuncias un desnivel. Una situación incómoda y que no garantiza en absoluto la privacidad del denunciante, pero que se va a intentar corregir con la obra de la Diputación.

El cuartel de Cambados presenta numerosas deficiencias debido al paso del tiempo. La sala de espera, por ejemplo, está junto a la entrada del edificio, lo que molesta a muchos ciudadanos, que entienden que su intimidad se ve violentada. Otro aspecto a corregir es la disposición de los calabozos, que están debajo de las viviendas de los agentes -algunos de los cuales tienen hijos menores de edad-, lo que origina muchas incomodidades.

Violencia de género

El capitán Xosé Antonio Rivero Zobra manifestó a preguntas de FARO que "en general están bajando todos los delitos contra el patrimonio". Lo que sí se ha detectado es un incremento de las denuncias por violencia de género. Aunque según él eso no es necesariamente malo. "En nuestra opinión, significa que están aflorando más casos, que cada vez más las mujeres reúnen la valentía necesaria para dar el paso y denunciar". El oficial señala que también hay un repunte de denuncias por delitos cometidos en internet, como estafas o suplantación de identidad.