El Concello de Ribadumia trabaja ya en la búsqueda de una solución adecuada para los vecinos que han visto como el coste del consumo de agua se les incrementaba de manera espectacular en las facturas de este ejercicio. El regidor, David Castro, reconoce que "existe ese problema y que muchos vecinos se han puesto en contacto con nosotros informándonos de lo ocurrido, con facturas que pasan de 60 a 300 euros".

El regidor se ha puesto en contacto con Augas de Galicia y con el ORAL, sobre todo porque el incremento del coste "se debe a que se suma el consumo de agua real de dos años, pero también a la aplicación del impuesto, que es lo que ha provocado estas facturas desorbitadas". Cuando se detectó el problema, el Concello comenzó a trabajar no solo en buscar una solución para los afectados, sino también en modificar un sistema de lectura de contadores que "está obsoleto y que es una herencia de anteriores gobiernos, ya que no se realizaba de manera adecuada". Insiste en que "nuestra intención es mejorar ese sistema garantizando que los contadores no estén dos años sin que se les realice una lectura".

A ello se suma la aprobación en la última sesión plenaria de un pago fraccionado de la factura en dos semestres, lo que aliviaría la carga económica que supone afrontar el coste del agua en un solo pago. El regidor lamenta el ataque del Partido Popular, ya que "se le dieron todas las informaciones precisas sobre lo que sucedía en ese pleno, pero han apostado por montar un teatro". Castro asegura que "no tenemos constancia de que se hayan cursado facturas de 2.000 o 3.000 euros, ya que ningún usuario en esa situación ha pasado por las oficinas municipales para comunicarlo". De todas formas, los conservadores mantienen su existencia, y esgrimen un recibo en el que la factura del agua a la que debe hacer frente el usuario asciende a la cifra de 2.653,08 euros en la parroquia de Barrantes.