El proyecto Galicia Birding, encauzado por la Xunta a través de Turismo de Galicia, aconseja a los amantes de la naturaleza en general, y a los ornitólogos en particular, a desplazarse este mes a O Grove y al Parque Nacional das Illas Atlánticas.

Es una recomendación lógicamente válida para el conjunto de turistas que en septiembre siguen en la comunidad y que de este modo pueden descubrir paraísos naturales y ornitológicos casi irrepetibles.

¿Pero por qué visitar O Grove e islas como Cíes, Ons o Sálvora? Pues porque "este rincón de las Rías Baixas es uno de los puntos de mayor atractivo para la observación de aves de toda Galicia", destacan en la Xunta.

Esto es así porque "su mezcla de marismas, playas, calas, acantilados escarpados e islas deshabitadas atraen a especies únicas".

Incidiendo en lo apuntado en otras ocasiones, Galicia Birding deja claro al visitante que en O Grove y su entorno -que no es otro que el complejo intermareal del que también participan localidades como Sanxenxo, Meaño, Cambados y A Illa-, podemos visitar tramos de costa rocosa con playas, marismas, dunas".

Pero para las aves igual de importante que el espacio intermareal de la ensenada de O Vao es todo el ecosistema que está a su alrededor, con "campos de cultivo y antiguas explotaciones de arcilla que atraen más aves".

Esto convierte a O Grove y su área de influencia en "uno de los lugares más extraordinarios para la observación de aves acuáticas y marinas del norte de la península Ibérica", de ahí que se contabilizaran "cientos de especies, algunas de ellas particularmente escasas o difíciles de observar".

Esta época del año resulta especialmente indicada para observar aves limícolas, pero también para empezar a ver aquellas otras que realizan su movimiento migracional otoñal, regresando desde sus áreas de cría a sus cuarteles de invierno.