La presidenta de la organización de productores OPP20 de A Illa de Arousa, Carmen Dios, recuerda a los usuarios de las playas que coger marisco en las zonas productivas sometidas a planes anuales regulados por la Xunta de Galicia es ilegal, independientemente de la cantidad o producto que se extraiga. De esta forma responde a la queja de un bañista que dijo sentirse amenazado por las mariscadoras por comer unas almejas en la playa.

"Nuestro trabajo está sometido a un plan anual de la Xunta de Galicia. En estas zonas de cultivo está prohibido extraer de todo, por lo que cuando una persona va a la playa y se come una almeja está cometiendo un delito porque antes tuvo que extraerla. Nos parece ridícula la queja del usuario porque además significa que reconoce que cometió el delito. También tenemos que recordarles a los bañistas que los bivalvos que están en estas playas sometidas a planes de producción se compran. Hemos invertido ingentes cantidades de dinero en semillas y trabajamos mucho durante todo el año. Además, desde mayo nos vemos obligadas a vigilar las playas para evitar que los bañistas esquilmen nuestro trabajo. Creo que a nadie se le ocurre ir a una finca de patatas y desenterrarlas para mostrárselas al niño; no sé por qué quieren justificarlo en estas zonas productivas", expone Carmen Dios.

La máxima responsable de la OPP20 puntualiza que no tiene nada en contra de los turistas y del resto de los bañistas que acuden asiduamente a las playas de A Illa de Arousa., siempre que respeten las señalizaciones donde claramente se indica que está prohibido mariscar de todo.

"Estamos encantadas con los turistas, que son otra fuente de ingreso para A Illa. No nos molestan, incluso cuando estamos trabajando y se nos acercan para preguntarnos sobre los trabajos de cultivo y extracción de marisco. Les explicamos todo lo que nos preguntan. Solo tenemos problemas con los amigos de lo ajeno y algunos nos responden de forma violenta, con insultos, cuando les decimos que están cometiendo una ilegalidad", declara Carmen Dios.