La reivindicación de la comunidad educativa del colegio O Piñeiriño de contar con un servicio de comedor no fue atendida en su totalidad por la Consellería de Educación, pero igual se pondrá en marcha este curso con la colaboración del Concello de Vilagarcía de Arousa,a pesar de no ser un servicio de competencia municipal.
El gobierno del Concello, que preside el socialista Alberto Varela, ha decidido aportar 35.000 euros para la creación del servicio de comedor. De esta forma cofinanciará la obra necesaria para la creación del comedor en este centro de educación infantil y primaria, estimada en casi 75.000 euros. Los otros 40.000 euros estarán a cargo de la Administración autonómica.
Fuentes municipales indican que la previsión es que elcomedor entre en funcionamiento con el curso ya en marcha, dado que es materialmente imposible tener la instalación lista y contratado el servicio para dentro de tres semanas que es cuando comienzan las clases.
En cuanto al trámite administrativo, el gobienro local ya está buscando la partida de la que obtendrá los 35.000 euros para posteriormente firmar un convenio con la Consellería de Educación, tal como se hizo para la construcción de un gimnasio en el colegio de Rubiáns.
Desde el gobierno lcoal apuntan que "nos gustaría que la Consellería de Educación asumiese de una vez sus competencias y atendiese, como es su obligación, las demandas de los centros escolares de Vilagarcía, en especial las más necesarias y urgentes, en lugar de trasladar a este concello costes de actuaciones que no nos competen. A pesar de esto, los vilagarcianos depositaron en este gobierno su confianza y nosotros consideramos que, dentro de nuestras posibilidades económicas debemos hacer lo que podamos para atender sus demandas y, sobre todo, para evitar que un colectivo, en este caso de un numeroso grupo de escolares y sus familias, salga perjudicado por la falta de compromiso de la Administración competente. Se trata de voluntad política, y por nuestra parte la tenemos toda".
El colegio O Piñeiriño hacía tiempo que reivindicaba ante la Consellería de Educación la dotación de un comedor escolar debido a la demanda existente y a las necesidades de las familias tanto económicas como de conciliación. La comunidad educativa incluso llegó a movilizarse, contando con el apoyo del gobierno municipal.
El alcalde actuó de mediador ante Educación e incluso traladó la demanda de los padres de alumnos al conselleiro. Producto de estas gestiones se convocó una nueva reunión, en este caso entre el jefe provincial de la Consellería y el concejal de Educación para concretar posibles soluciones.
