La segunda edición de la BTT de Meis, que se celebra coincidiendo con la celebración de la Festa dos Callos, adquiere ya unas dimensiones importantes. En la jornada de ayer más de medio millar de ciclistas llegados desde diferentes puntos de Galicia se lanzaron a recorrer los montes de Meis en una ruta exigente diseñada por la organización y que incluía tramos muy técnicos a la par que duros.
Esos tramos estaban pensados para personas con un dominio de la BTT importante, por lo que la organización decidió presentar una alternativa más suave para los ciclistas que percibiesen el recorrido como muy exigente. Así, se habilitó una ruta de 40 kilómetros y otra de 35, menos dura, aunque igual de atractiva para disfrutar de una bonita mañana en bicicleta y de los paisajes que ofrecen los montes de Meis. Dos horas y media después de dar la salida en el Campo da Feira, comenzaban a llegar los primeros participantes con semblante cansado pero satisfechos del resultado y del recorrido realizado.
Todos los participantes recibieron un merecido premio por su participación, consistente en una ración de callos gratuita que, muchos de ellos, degustaron con avidez para reponer fuerzas tras la dura mañana, en las que se superaron rampas con un desnivel de más del 10%. La mayor parte de los participantes, aunque con dificultades, consiguió completar el recorrido, y no se registraron incidentes de importancia más allá de algunas caídas en los tramos más complicados.
La BTT no fue la única actividad deportiva diseñada para complementar la Festa dos Callos. La organización de la prueba ciclista también puso en marcha una Andaina, en la que participaron cerca de 200 personas. Al igual que la BTT, el trazado era sumamente exigente, llevando a los participantes muy cerca de la cumbre del Castrove a través de distintas pistas forestales. Los participantes, al igual que sus homólogos de la BTT también recibieron como premio una buena ración de callos para reponerse del ejercicio realizado.
