Desde hace once años los aficionados a las motocicletas tienen todos los primeros de mayo una cita ineludible. La concentración de motos antiguas se ha convertido en un evento que mantiene un crecimiento continuo a cada edición. Una evolución en positivo que no solo se ha apuntalado en términos cuantitativos, sino también en lo cualitativo. Cada año el valor de los prototipos que se presentan a la ruta parece multiplicarse. Una realidad que genera una expectación que asciende también en términos proporcionales.
La novedad de este año es que por vez primera la Ruta de Motos Antiguas discurrirá por la provincia de Pontevedra y Vilanova será una de sus paradas estratégicas. El Moto Club Padrón ha diseñado un trayecto que partirá a las once de la mañana desde el municipio padronés para convertir O Salnés en la comarca más afortunada a la hora de poder disfrutar de motos de más de treinta años. Modelos que se han convertido en únicos y que cautivan con una mezcla de elegancia, cilindrada y cuidado de cada uno de sus detalles.
José García, directivo de la entidad organizadora, constató la dimensión que ha adquirido el evento entre los que guardan en sus garajes motos de un enorme valor que va más allá de lo sentimental. "Reuniremos más de 200 motos todas ellas con más de 25 años de antigüedad. Se trata de un día de homenaje a todas las personas que cuidan esas joyas y a todos aquellos que quieran verlas porque muchas de ellas son casi piezas de museo".
Tras salir del Centro Social de O Souto en Padrón (11.00 horas), la caravana tomará rumbo hacia Pontecesures, Valga y Caldas de Reis. Desde allí discurrirá hacia Vilagarcía y tendrá un primer paso por Vilanova antes de atravesar el puente de A Illa y dar una vuelta al municipio cerca de las 11.30 horas. Desde allí se dirigirán a la conocida como parada del pincho que tendrá lugar en los alrededores del pabellón multiusos de Vilanova. Allí, durante una hora, todas las motocicletas estarán concentradas para que puedan ser observadas al detalle por los aficionados antes de emprender regreso a Padrón para la comida oficial tras rodar nuevamente por Vilagarcía, Catoira y Dodro.
No faltará representación portuguesa. Hasta tres motoclubes lusos han confirmado su presencia con motos de altísimo atractivo, casi todas ellas de importación y en un excelente estado de conservación. José García adelantó que "esperamos la llegada de tres motos Indian que son motos que superan fácilmente en el mercado los 80.000 euros. Alguna de ellas es incluso de los años veinte. Son motos que merece mucho la pena ver".
La comida que servirá como colofón a esta undécima edición será también el reparto de premios a los pilotos más implicados en cuestiones como la restauración, la antigüedad o la conservación. También se premiarán las mejores motos con sidecar o al piloto de mayor edad en lo que será toda una fiesta sobre dos ruedas.
