Mañana viernes a las 20 horas el Pazo de Torrado en Cambados inaugura una exposición individual de Francisco Pazos. El artista meañés, uno de los escultores gallegos del momento y de mayor proyección en el exterior, muestra una veintena de piezas representativas de su fase creativa de los últimos 20 años. Sin duda una ocasión excepcional para acercarse a la obra y a la figura de este meañés que el pasado mes de julio era galardonado con el premio Francisco Asorey de escultura. En su haber más de un centenar de exposiciones que han convertido su obra en reconocible dentro y fuera de Galicia, estando representada hoy en lugares como Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), museo de Pontevedra, Vigo, A Coruña o Alcobendas, y en numerosas colecciones particulares de España.

- No es habitual una exposición individual de Francisco Pazos en O Salnés.

- La verdad es que es cierto. En este caso responde a un proyecto por el que ya mostrara su interés hace un tiempo José Vaamonde desde el Pazo de Torrado, que es una persona muy implicada en todo este mundo, y que cobró de nuevo brío a raíz del premio Asorey que me concedieron en julio del pasado año.

- ¿Qué se va a encontrar el visitante de esta exposición en el Pazo de Torrado?

- Se va a encontrar una muestra de algo más de una veintena de obras distribuidas entre las diversas salas y que, en lo referente a materiales, es la más variada que expuse nunca: desde la madera a la piedra, pasando por acero cortén, ladrillo, hierro, aluminio, papel prensado?

- ¿Son obras recientes o más bien responden a una antología de sus diversas etapas creativas?

- Es más bien obra de la última etapa. La más antigua es un cuadro en madera del año 1998 y, en escultura, una pieza de 2011. La distribución en diversas salas permitió además jugar mucho con el espacio, no solo jugando con los materiales, sino también con la forma, como una sala que destinamos a piezas donde prima la verticalidad, aun siendo concebidas en materiales diferentes.

- ¿Uno se va a encontrar también aquí con el Pazos de las formas redondeadas que beben en la etnografía gallega?

- Hay un poco de todo, pero quizás en esta ocasión priman más las formas geométricas vinculadas al acero cortén y otros materiales con los que estoy trabajando más de un tiempo a esta parte. Cierto que algunas otras recuerdan esa fase de formas redondeadas, sobre todo una "instalación" de pequeños guerreros, que es un serie de diez pequeñas piezas de tan solo 23 centímetros de alto que sí evocan esas formas.

- ¿A Francisco Pazos le compran más dentro o fuera de Galicia?

- Yo diría que al cincuenta por ciento. Hay gente de Galicia que se pasa por el taller para conocer la obra y comprar alguna pieza, pero también otras que se están vendiendo bien fuera. El pasado año en Art Madrid fui de mano de una galería muy valorada que vendió toda la obra y aún tuve que enviar alguna más, este año en la misma feria se vendieron dos piezas significativas, una fue para Barcelona y la otra se quedó en Madrid. Pero he de reconocer que a mí me sigue gustando mucho vender entre la gente de aquí.

- ¿Por qué?

- Porque me gusta poder hablar luego con ella, conocerla, que te paren por la calle y que te digan que les gusta la obra? Eso supone para mí siempre un orgullo y una satisfacción grande, es algo que pierdes si la obra se vende fuera.

- ¿Y se siente verdaderamente valorado Pazos en Meaño y, por extensión en la comarca?

- Sí, claro que me siento valorado.

- Se lo comento porque, pese a su prestigio, a nivel institucional las administraciones, bien sea local, comarcal o autonómica, parecen olvidarse de su obra.

- En este momento parecen olvidarse de la obra de todos nosotros (risas). Sí, es cierto que no se ve mucha pública mía, quizás tampoco porque yo me esmere mucho en acercarme a ese mundo, preferí mantenerme siempre algo al margen, cada uno es como es.

- ¿Qué fue de aquel mueble policromado que se le demandó el pasado año para la feria de decoración "Formex" de Estocolmo?

- El mueble causó sensación y está todavía en Suecia porque la firma organizadora me pidió mantenerlo allí dado que quería exponerlo en más ferias de decoración.

- ¿Y su guerrero de la muestra "China y la UE y los guerreros del Emperador Qin" que desde 2013 recorre mundo?

- La última ciudad en que estuvo fue en Londres hace, tres o cuatro meses. Ahora tiene como próximo destino Francia o Italia.