Galicia se promociona no solo como destino privilegiado para el turismo desde una óptica global, sino también como un pequeño paraíso para los amantes de la naturaleza en general, y para los aficionados a las aves, en particular.
Lo hace en la Feria Internacional de Turismo Ornitológico (FIO) que se celebra entre ayer y mañana en el Parque Nacional de Monfragüe, en Cáceres, por mediación de la Agencia de Turismo de Galicia y el Concello de O Grove.
Son las dos instituciones que ejercen como embajadoras de la comunidad autónoma en el exterior, y para ello no solo exponen todas las potencialidades turísticas existentes y más habituales, como la cultura, gastronomía, playas, termalismo y similares, sino que insisten en acciones como Galicia Birding y el Proyecto de Inversión Ornitológica (PIO) del municipio meco; dos acciones especialmente diseñadas para fomentar el turismo verde y atraer a los observadores de aves, cada vez más numerosos en todo el mundo.
Hay que recordar que FIO, donde O Grove ya es un expositor veterano, alcanza su decimosegunda edición tras convertirse en el segundo certamen más importante de Europa dentro de sus características, siendo ya la decana de las ferias de su especialidad en España.
Se considera "una cita obligada para los profesionales y los aficionados a la naturaleza" capaz de atraer a 12.000 visitantes.
Organizada por la Junta de Extremadura, que gracias a esta feria ha situado a esta región "en el mapa mundial de la observación de aves", FIO reúne "empresas especializadas, destinos turísticos -como O Grove- y asociaciones conservacionistas", además de promover "encuentros entre profesionales y una programación que combina el aspecto empresarial y el lúdico".
Destacan las jornadas técnicas y conferencias, entre ellas la prevista para dar a conocer el trabajo realizado por el barco-escuela "Chasula", con puerto base en O Grove y especializado en la realización de expediciones para la observación de aves y cetáceos dentro y fuera de la ría.
