El departamento de Servizos Sociais del Concello de Vilagarcía de Arousa, que dirige la concejala Tania García Sanmartín, trabajó durante ocho meses con 15 familias en situación de emergencia social con el objetivo de ayudarles a superar este estado y alcanzar la plena autonomía. La memoria de este programa, que incluye una encuesta de los usuarios, indica resultados muy satisfactorios, ya que éstos puntuaron el servicio con 4,8 sobre 5 puntos.

El programa llevado a cabo entre abril y diciembre de 2016 es el tercero de este tipo que se lleva a cabo con familias en situación de emergencia social y cuenta con financiación de la Diputación a través del Plan Provincial de Cooperación.

Las quince unidades familiares beneficiarias en esta edición fueron derivadas a través de los Servizos Sociais del Concello. De ellas, 5 correspondían a familias monoparentales, siendo en cuatro casos una mujer la responsable de la unidad de convivencia y una sola monoparental con un hombre al frente.

Todos los participantes compartían aspectos como contar con cargas familiares, perder el puesto de trabajo, tener agotada la percepción de prestaciones por desempleo y tener dificultades para hacer frente a la satisfacción de necesidades básicas como la alimentación, la gestión de deudas, entre las que destacaban las relacionadas con el suministro eléctrico y de agua, abono de recibos mensuales de créditos hipotecarios, e impago de impuestos municipales.

Otra característica en común de los participantes son los síntomas depresivos y de ansiedad que presentaban por el desgaste y desesperación que les genera la situación por la que están pasando. En este sentido, destaca el Concello que las sesiones del programa sirvieron también "como tiempo de ventilación emocional" para los participantes.

El programa se impartió a través de sesiones grupales con temas que afectaban a todos los asistentes, y sesiones individuales ajustadas a las problemáticas y situaciones concretas de cada familia.

Los contenidos fueron adaptándose a las necesidades que se iban detectando, como charlas sobre aspectos de ahorro y reclamaciones en materia de suministros energéticos o a través del Spad para abordar la temática de prevención del consumo de drogas.

La memoria de la actividad destaca como logros la obtención del bono social para el suministro eléctrico, la revisión de las potencias eléctricas contratadas por las familias, la gestión de aplazamientos en el pago de los recibos de agua y otros impuestos municipales, así como las bonificaciones fiscales en la administración local y la exención del canon del agua.

Con la asistencia de los técnicos también se presentaron reclamaciones y se negociaron las condiciones de las comisiones bancarias, así como los embargos de la Risga y de las cuentas bancarias.

A nivel emocional se concertaron citas con servicios de salud mental y el educador familiar del Concello de Vilagarcía.