La Concejalía de Seguridad ha reabierto en la mañana de ayer el acceso a la playa de Paxariñas, cerrado este fin de semana cautelarmente tras recibir el aviso de varios usuarios sobre un posible desprendimiento de rocas sobre la arena.

Una primera inspección de la Policía Local y del Servicio Municipal de Emergencias realizada a mediodía del domingo no detectó desprendimientos, pero la Concejalía de Seguridad decidió igualmente impedir el acceso a la playa como medida preventiva, ya que durante la tarde del domingo fueron muchos los vecinos que se acercaron al litoral para comprobar los efectos del temporal.

Ayer un técnico del Servicio de Costas se acercó a Paxariñas para comprobar el estado del acantilado, constatando que la malla metálica instalada en el año 2015 para contener el acantilado ha hecho su función, resistiendo el fuerte temporal.

Sin embargo, y al igual que ha ocurrido en otras ocasiones, las fuertes mareas arrastraron arena, dejando al descubierto las rocas; un efecto que los técnicos consideran que será reversible de forma natural.

Incidencias

El Servicio Municipal de Emergencias ha atendido durante el fin de semana un total de 37 incidencias, que fueron atendidas a través de un operativo en el que también colaboraron operarios municipales de la brigada de Servicios, así como agentes de la Policía Local y trabajadores de la empresa concesionaria de la recogida de residuos, que se encargó de colocar y reponer los contenedores dañados por el temporal.

Resta todavía valorar los daños que el temporal ha dejado a su paso por Sanxenxo, donde ha derribado alguna farola, postes eléctricos y de telefonía e incluso ha roto varios espejos ubicados en los cruces para mejorar la seguridad vial y que el Concello anuncia que repondrá progresivamente en las próximas semanas.